Fiestas de adolescentes en la actualidad. ¿Recuerdas cómo eran las fiestas cuando ibas a la secundaria y la preparatoria? ¡Pues las de los adolescentes de hoy en día no tienen nada que ver! Créenos que los juegos de la botella, semana inglesa y siete minutos en el cielo son una bobería comparado con lo que hacen ahora.
No pretendemos asustarte, pero sí creemos que debes tomar consciencia de los riesgos que están tomando tus hijos, cuando crees que sólo están bailando y conversando con sus amigos.
Actualmente, en las fiestas no sólo hay drogas, sino que los adolescentes están teniendo sexo sin protección con desconocidos, y han comenzado a consumir alcohol en formas increíblemente absurdas y peligrosas.
Existen tres tipos de fiestas de adolescentes que se están popularizando
- Semáforo. Los asistentes reciben drogas para garantizar “la diversión” y deben usar brazaletes de colores para indicar “qué tan bien la quieren pasar” durante la fiesta. El rojo es señal de que tienen pareja o están acompañados, el amarillo de que tienen dudas sobre iniciar o no una relación, y el verde es que están dispuestos a todos. Durante el evento se buscan nuevas formas de consumir alcohol, como el “slimming”, que consiste en introducir la bebida a través de los ojos, la vagina y el ano. Por si fuera poco, en las fiestas semáforo es común que se realicen las llamadas ruletas sexuales, un juego en el que los jóvenes tienen relaciones sexuales sin protección, mientras bailan. Aquél que eyacula primero, pierde.
- Candy. En este tipo de fiestas hay drogas y alcohol al por mayor, pero el verdadero peligro es que los asistentes deben tener relaciones sexuales durante el evento. El problema es que el sexo es con desconocidos, pues la convocatoria para la fiesta se lanza por redes sociales, y no es precisamente en un lugar privado. Al ritmo del reggaetón, el grupo musical va indicando las posturas que deben adoptar durante el acto sexual, en la pista de baile.
- Arcoíris. Es la última tendencia en fiestas para adolescentes. ¿En qué consiste? Básicamente, las jóvenes se pintan los labios de colores llamativos y luego practican sexo oral a desconocidos como parte de una competencia. La que más marcas haya dejado, gana. Por supuesto, las chicas saben que no hay forma de quedar embarazadas con esta práctica sexual, pero olvidan que están expuestas a contraer infecciones de transmisión sexual, como herpes, sífilis, gonorrea, clamidia y virus del papiloma humano, siendo ésta última la causante de diferentes tipos de cáncer (boca, laringe, garganta y lengua).
Al igual que con las fiestas Candy, la convocatoria para las semáforo y arcoíris se hace a través de redes sociales, donde incluso se exhiben videos de eventos anteriores y en los que se puede ver a los jóvenes participando en actividades sexuales riesgosas.
Aproximadamente de 797 mil adolescentes que alguna vez han tenido relaciones sexuales no utilizan algún método anticonceptivo, de los cuales 48.9% son mujeres y 51.1% hombres –esta es la etapa de mayor riesgo para adquirir una ITS. Méxicosocial.org
Por supuesto, la forma más efectiva de evitar que tus hijos asistan a estas fiestas o participen en este tipo de juegos es manteniendo una buena comunicación con ellos. Es necesario que conozcan los peligros a los que se exponen y las posibles consecuencias de sus actos.
La información es poder y no todas las fiestas son de esta forma, sin embargo es básico tener comunicación con los adolescentes para saber qué es lo pasa en sus reuniones y no juzgar, si no escuchar y orientar, entre más lo prohibas más lo va a hacer, pero si cuenta con la información ni se lo vas a tener que prohibir, sólo va a tomar las decisiones que favorezcan su salud.
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