Imagínate, viernes en la noche, la oficina ha quedado atrás y esa compañera de la prepa que taaaanto deseabas, te mandó whatsapp antes de salir para insinuarte una rica salida al cine; ya estando ahí, la película transcurre sin la más mínima atención por parte de ambos, pues todo son besos, abrazos y caricias.
Como no queriendo la cosa, los de la limpieza del cine, los “invitan” a que salgan y tú, con nervio y toda la cosa, le preguntas a tu compañera si le gustaría ir a tu depa. Ella dice el sagrado y más sensual “sí”. Juegos pirotécnicos de colores, bombean a tu corazón y claro, más debajo de tu sonrisa, la cual se ilumina por todos los faros de la ciudad.
Llegado el momento, preparas tu playlist de las rolas más sensuales para echar pasión y, al calor de los besos, suena como un disco se raya, cuando al comenzarla a desvestir, ella dice “no”. ¡WTF!
Comencemos por los pobres a los que les toca a meterse a bañar con “el agua fría” ¿qué hacer en esos casos?
Por más que mueras de frustración, sé lindo con tu acompañante, pues te aseguramos que ponerte como energúmeno, no la armará especialmente de afrodisíaco para que se aviente a tus brazos y te coma completo.
Haz que se sienta en confianza contigo, que sepa que aunque al final haya decidido parar las cosas y dejarlas a medias tintas, tu le darás su espacio y su tiempo para poder estar juntos o no, como sea lo bailado nadie te lo quita -por poco que pienses que sea-.
¿y si soy quien calentó el boiler y no se metió a bañar?
¡Mereces el infierno! ¡También mereces que pises una pieza de lego cuando vayas caminando descalza o descalzo ahí por la vida y que si eres Godínez pierdas todo tu bono de productividad!
¡No te creas! Está bien que te hayas dado tu tiempo, pues es peor arrepentirse después de cosas que uno no estaba convencido de hacer ¡SIN EMBARGO, NO SEAS CRUEL!, plantéale bien las cosas a tu compañerx en turno, el rumbo y ritmo que te gustaría que fueran tomando. Si vas viendo que no le late ¡pues ni paper! ¡que se aguante!
Cómo detectar a un incendiario de leñas
Es un fanfarrón o fanfarrona, le encanta andar diciendo que es el azote de los catres, pero a la hora de la hora ¡puras habas!
Son de los que guiñan el ojo, enseñan pierna ¡pero no la venden!
Les encanta la coquetería e inclusive “de cuates” te han invitado a que los acompañes a comprar ropa, “insinuando” piezas de lencería, pero cuando les regresas coquetería como moneda de cambio ¡no más no caen!..
…¿No serás más bien que eres un pervertido?
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