Los accidentes de trabajo son todas las lesiones que puedes sufrir cumpliendo con tus obligaciones laborales, o en alguna actividad relacionada con tu empleo, sin importar el lugar o tiempo en el que se presenten.
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en 2014, se registraron 409 mil 248 accidentes de trabajo, siendo zona de la mano y muñeca la que más lesiones sufrió (27.6%), seguida por el tobillo y pie con 14.3%, y cabeza y cuello con 11.7%.
Asimismo, 85.3% de los accidentes de trabajo dieron como resultado cinco tipo de lesiones: traumatismos superficiales 28.9%; luxaciones, esguinces y desgarros con 24.3%; heridas 18.7%; fracturas 9.5% y traumatismos 3.9%.
Y si quieres saber cuáles son las profesiones en las que se presentan más accidentes de trabajo, sólo podemos decirte que 17.4% de lo que se registran a nivel nacional los sufren empleados de servicios de apoyo a la producción, vendedores y demostradores de tiendas 8.1%, peones de carga 4.2%, empleados de limpieza 4.1% y cocineros 3.5%.
Lo peor es que no todas las lesiones son leves. Un gran número de personas quedan incapacitadas de por vida o mueren por un accidente de trabajo. Los datos del IMSS revelan que, en 2014, 13 472 empleados tuvieron que ser indemnizados o pensionados debido a la gravedad de sus heridas.
En tanto, 1,345 personas fallecieron por un accidente de trabajo, cifra relativamente mayor a la registrada en 2013, cuando se reportaron 1,314 defunciones por este motivo.
Y aunque es cierto que los accidentes laborales se presentan en el momento menos esperado, debes saber que al menos 50% de estos percances están relacionados con la mala calidad del sueño y el síndrome de fatiga crónica.
Así que si no quieres formar parte de la estadística, debes asegurarte de dormir por lo menos siete horas diarias. Esta sencilla práctica no sólo te ayudará a estar alerta todo el tiempo y prevenir accidentes, sino que elevará tu desempeño y productividad.
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