Seguramente, asocias las toallitas húmedas con los bebés, pero debes saber que, aunque son artículos básicos en el cuidado de los pequeños, también puedes usarlas en diferentes tareas de limpieza de tu casa. Así que mira estos usos alternativos de las toallitas húmedas.
Así es no solo sirven para taparte la nariz y boca cunado un bebé se hace popó ¿Qué, no son para eso? Bueno eh ahí otro uso alterno de estas toallitas milagrosas.
Sabiduría que ayuda: estamos hablando de los grandes beneficios y usos alternativos de las toallitas húmedas, pero como todo tiene sus contras, como el que causa daño al medio ambiente al entrar en contacto con el agua, y que llegan a atrofiar los sistemas de desagüe o sistemas de depuración. Así como que a nuestra piel le quitan su aceite natural provocando deshidratación de la misma.
Para que te des cuenta de todo lo que puedes hacer con las toallitas húmedas, y las agregues a tu lista del supermercado, aquí sus siete usos alternativos.
- Teclado. ¿Sabes que el teclado de tu computadora guarda más bacterias y suciedad que el escusado? Evita enfermedades y límpialo frecuentemente con una toallita húmeda. Sólo debes darle vuelta, sacudirlo y luego pasar el pequeño paño para retirar las migajas, polvo y pelusas que pudieran quedar. Antes de hacerlo, debes asegurarte de que tu teclado esté desconectado.
- Piel. Las toallitas húmedas son perfectas para quitar las manchas y suciedad de tus chamarras, sillones y vestiduras de tu coche.
- Crayón. Si tienes hijos en etapa creativa, sabrás que cualquier superficie es perfecta para dibujar, por lo que usualmente tus paredes están rayadas con crayón. Para retirar sus obras de arte fácilmente, sólo tienes que pasar una toallita húmeda sobre la zona afectada.
- Juguetes. Muchos juguetes, en especial muñecas, no pueden lavarse por los mecanismos que tienen en su interior; sin embargo, puedes usar toallitas húmedas para quitar la suciedad y dejarlos como nuevos.
- Perro. Las toallitas húmedas te permitirán perfectamente todo el lodo que se pega a las patas de tu perro, después de una larga caminata bajo la lluvia, y cuando se la pasó jugando en el jardín. También puedes usarlas para limpiarle las orejas.
- Zapatos. Esos días en los que vas retrasado para una reunión y no tienes tiempo de bolear tus zapatos, puedes usar una toallita húmeda para limpiarlos y dejarlos relucientes.
- Excremento de pájaro. Si acabas de lavar tu coche y al salir de la oficina descubres que una parvada decidió usar el parabrisas como baño público, no te preocupes. Las toallitas húmedas son perfectas para retirar todo el excremento.
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