La fractura de clavícula es muy frecuente en personas que sufren una caída directa sobre el hombro o con el brazo extendido, también por un golpe directo sobre la clavícula. Al producirse una fractura de clavícula los datos más evidentes que aparecen y te harán sospechar esta lesión son, la hinchazón, el hueso medio chueco y por supuesto mucho dolor al tratar de mover y al tocar directamente el hueso.
En ese momento lo que hay que hacer es inmovilizar el brazo para que la fractura de clavícula no se desplace, es decir, que pierda su alineación y sea más difícil de manejar después y posteriormente acudir a un centro médico para sacar RX e inmovilizar de la manera correcta según el tipo de fractura. En el trayecto se puede tomar un analgésico-antiinflamatorio para disminuir el dolor y la inflamación. El tratamiento de estas fracturas suele ser sencillo con un vendaje en 8 y pegan en pocas semanas si se llevan a cabo los cuidados necesarios.
Las indicaciones de cirugía para este tipo de fracturas son muy pocas a menos que la fractura se desplace.
El secreto de una buena recuperación para este tipo de lesiones, son una buena inmovilización y los ejercicios posteriores que deben iniciarse una vez que se confirme por RX que la fractura está consolidada y que el paciente tolere el movimiento.
En algunos casos queda como un chipotito por encima de la fractura, este es un callo que se forma el cual no produce ninguna limitación o molestia y suele disminuir con el tiempo.
En general son lesiones de buen pronóstico si se manejan adecuadamente.
Recuerda que estas son recomendaciones generales y que siempre es necesario acudir a tu médico especialista para una exploración física y manejo personalizado.
Como siempre es un placer compartir contigo, si tienes dudas o aclaraciones escríbenos en Twitter @lizethgerard.
Hasta la próxima.
Dra Lizeth Gerard
Medicina del deporte