A veces resulta difícil hacer la diferencia entre un episodio de depresión bipolar o unipolar. A final de cuentas los síntomas son los mismos, pero resulta importante conocer la diferencia entre estas dos patologías, sobre todo en el tema de evolución y tratamiento:
- En los pacientes portadores de trastorno bipolar, la depresión es la fase más frecuente, incluso encontrándose en alrededor del 66% del tiempo de vida de estas personas.
- Los síntomas de depresión son mucho más intensos y más difíciles de responder al manejo adecuado, incluso es más frecuente que se les clasifique como portadores de depresión resistente al manejo farmacológico.
- Hay que tratar de evitar en la medida de los posible el uso de antidepresivos en estos pacientes ya que se ha demostrado que incrementa el número de “switches” entre depresión e hipomanía en los pacientes en los siguientes 12 meses. Sí en efecto, mejoran más rápido, pero presentan mas complicaciones a largo plazo.
- Lo común es que la presentación inicial y “debut” dentro del ámbito de los síntomas emocionales sea por medio de los síntomas depresivos y no de los hipomaníacos que son más fáciles de identificar. Siendo así, es muy importante darles seguimiento, ya que pueden ser mal clasificados como deprimidos unipolares y, por lo tanto, no darles el mejor tratamiento posible.
- Si se les da manejo antidepresivo es común que lleguen a presentar y cambio de estado de ánimo a síntomas hipomaníacos de forma súbita e incluso inesperada, con lo cual hay que tomar medidas urgentes en el tratamiento y corregirlo para renivelar las emociones de los pacientes.
Los pacientes portadores de trastorno bipolar suelen iniciar con la presentación de sus síntomas entre los 15 y 25 años de edad, con lo cual si se tienen antecedentes familiares de esta patología, o si se presentan síntomas “atípicos” de depresión conviene ser cautelosos en el manejo y con una supervisión cercana para hacer las cosas de la mejor forma posible y así tener la mejor evolución.