Una de las sensaciones que durante toda mi vida he tenido y que siempre está en mi mente es que por más cosas que haga o situaciones que resuelva nunca es suficiente. Esta sensación es algo muy común en la mayoría de los seres humanos, que genera una impresión constante de insuficiencia que me resulta paradójico, lo que yo consideraba una deficiencia personal es en sí una pandemia.
En muchas ocasiones mis compañeros de Evolución Terapéutica me decían que por que no cambiaba mi mirada y en vez de estar pendiente de lo que no hacia volteara mi mirada hacia lo que si hago; la verdad es que nunca comprendí del todo lo que me querían decir.
Cuando comenzó la pandemia, entré en una situación que se parecía más al pánico que al miedo, deje de asistir a mi trabajo en Evolución terapéutica y fueron muchos meses en los que permanecí encerrado y aunque no ha sido grato este tiempo de encierro, me ha servido para darme cuenta de que hay muchas cosas que en condiciones normales no le daría ningún valor por esta tendencia que tengo de sentir que nada de lo que hago es suficiente, pero dada está condición de encierro, he aprendido a apreciar cosas que hago y ver que tienen un valor que nunca les había dado.
Una de las acciones que llevé a cabo a raíz del miedo exacerbado que tuve los primeros meses de la supuesta pandemia, fue la de buscar otro tipo de información que no fuera la oficial y aunque mucha la han estado bloqueando, encontré información que me hizo ver que lo que prevalecía en los medios era como para crear pánico, incluso vi información sobre remedios para el covid19 que se están aplicando con buenos resultados pero que los canales oficiales bloquean, esto en otras circunstancias no le hubiera dado el gran valor que tuvo para mí, ya que con esto fui creando herramientas para poder con el miedo y fue el inicio de aprender a reconocer lo que si hago
Otras actividades que desde hace años he realizado es la de tomar cursos en línea a los que tampoco le daba ningún valor; con el encierro la oferta de cursos baratos y gratuitos se incrementó lo que me permitió tomar muchos cursos que aunque no tienen ningún valor curricular para asuntos laborales me proporcionan elementos para tener otra perspectiva de la vida a interpretar lo que vivo de forma diferente y me han dado elementos para poder ser un mejor ser humano y un mejor terapeuta; otro valor agregado a ver lo que si hago.
Otra de las acciones que realizo cotidianamente y que nunca le había dado el valor que tiene y de los beneficios que ha traído a mi vida; todos los días hago dos meditaciones por lo general, una en la mañana y otra en la tarde o noche y ahora aprecio lo que me ayudan para tener una situación emocional sin tantas alteraciones como las he tenido en mi vida y lo valoro como algo importante para mí, esto ha sido en estos últimos tiempos en los que he aprendido a darle valor a lo que si hago y no como antes que solo estaba pendiente de ver lo que no era conseguido como un gran logro.
Otra de las actividades que realizo todos los días son dos tipos diferentes de ejercicios unos que son para mantenerme bien físicamente, uno que me dio un fisioterapeuta para que mis piernas se mantengan con fuerza y el otro es una caminata de media hora, otra actividad que si hago y durante mucho tiempo ha sido de mucho apoyo para mí bienestar físico, el cual no valoraba
Dos o tres veces a la semana preparo comida, he estado experimentando hacer diferentes guisos, lo que se suma a lo que si hago; cada 2 o 3 días hago una serie de ejercicios tendientes a mover la energía del cuerpo y estoy tomando un curso sobre detección y aplicación de la energía corpórea.
Esto que les comparto es con el fin de hacerles ver la forma inconsciente en la que estuve devaluando muchas de las actividades que llevaba a cabo e invitarlos a que al igual que yo lo hice, revisen sus actividades y le den el valor que tiene en sus vidas esas actividades que por lo general no tomamos en cuenta como lo que realmente hacemos.