¡Por fin sucedió! El amor de tu vida te ha pedido que se casen, y aunque te encanta la idea de pasar el resto de tu vida junto a él, en este momento, lo que te tiene al borde del éxtasis es planear la boda de tus sueños.
Seguramente, tienes una idea muy clara de cómo y dónde deseas que sea tu boda, pero es necesario afinar detalles, como el número de invitados, el banquete, el pastel, las flores, y por supuesto, el vestido.
Desde luego, cada uno de estos aspectos impactará el costo total de la boda, por lo que debes sentarte con tu futuro marido y tomar las decisiones necesarias. Recuerda ser realista y apegarte a los gastos que puedan cubrir.
Una vez que hayas establecido el monto aproximado de la boda, habrá llegado el momento más tormentos del proceso de planeación: pagar.
Es cierto que podrían utilizar sus tarjetas de crédito para cubrir los gastos de la ceremonia y la fiesta, pero no hay peor forma de iniciar su vida de casados que con una deuda estratosférica, por lo que deberán dar muestra de sus habilidades para ahorrar.
Para que no les resulte tan difícil engordar a su cochinito nupcial, aquí te dejamos unos tips que seguro te ayudarán a alcanzar la meta en poco tiempo:
- Presupuesto. Hagan un presupuesto en el que contemplen lo que gana cada uno al mes, y los gastos que hacen. Esto les dará una idea del dinero que podrían disponer para la boda.
- Gastos hormiga. Corta todos los gastos innecesarios. Deja de comprar cafés todos los días y evalúa que tan indispensable es que te compres ropa cada quincena. Incluso, debes olvidarte de ir a comprar golosinas a la tienda de conveniencia a media jornada de trabajo.
- Renta. Tal vez a muchos no les parezca buena idea el que vivan juntos antes de casarse, pero hacerlo, no sólo les dará la oportunidad de conocerse a otro nivel y trabajar en su dinámica, sino que pueden ahorrarse una renta, gastos de manutención y servicios.
- Vintage. Ahora que está tan de moda comprar cosas de segunda mano, puedes vender toda la ropa y objetos que ya no uses. ¡Podrías tener algún tesoro escondido en tu desván! Si de plano no quieres hacer una venta de garaje, puedes recurrir a los diferentes portales de internet dedicados a la compra -venta de mercancías.
- Cuenta bancaria. Aunque la idea de poner todo tu dinero en una alcancía resulte romántica, considera abrir una cuenta de ahorros. Evalúa cuál es la que te da más intereses y evita tocar ese dinero.
¿Qué otras ideas se te ocurren para ahorrar el dinero necesario para tener la boda de tus sueños?