Lo sabemos. Para ningún padre es sencillo despegarse de su hijo recién nacido. Por supuesto, con el tiempo te acostumbras, pero siempre dudas si haces bien en dejar a tu pequeño en la guardería.
Además del temor de no saber quién está al cuidado de tu hijo, te preocupan todas esas historias trágicas que suelen aparecer en las noticias. Sin embargo, debes saber que las cosas no siempre son malas. Hay centros dedicados al cuidado de los pequeños que realmente están interesados en su desarrollo.
Hoy queremos presentarte la historia de una de estas guarderías. Se trata del Centro de Aprendizaje Intergeneracional (Intergenerational Learning Center), el cual está ubicado en Providence Mount St. Vincent, un asilo de ancianos en Seattle, Estados Unidos.
Tal vez te parezca algo loco, porque qué tendrían que hacer adultos mayores y niños compartiendo el mismo espacio, ¿no? La realidad es que el experimento ha resultado ser todo un éxito.
Durante los cinco días a la semana que abre la guardería, los pequeños conviven con los 400 residentes del asilo, con quienes realizan diferentes actividades, relacionadas con la música y el baile. Además, dedican tiempo a realizar manualidades, y por supuesto a contar historias.
La convivencia de estas dos generaciones resulta benéfica para todos. Al relacionarse constantemente con adultos mayores, los niños no sólo aprenden sobre el proceso de envejecimiento, sino que se vuelven más receptivos hacia las personas mayores. Además, reciben atención y amor de los residentes del asilo.
Por otro lado, la interacción con los pequeños permite que los ancianos refuercen su autoestima, ya que se sienten queridos y valorados. Pero eso no es todo, ya que tienen la oportunidad de transmitir sus conocimientos a unas mentes curiosas y ansiosas de devorarse el mundo.
La propuesta de esta guardería es tan interesante que la cineasta Evan Biggs decidió grabar un documental en el que mostrara cómo ha cambiado la vida de los residentes de Providence Mount St. Vincent.
La cinta, que lleva por título Present Perfect fue grabada entre 2012 y 2013, y fue completamente financiada por Biggs. De hecho, fue gracias al tráiler del documental que el mundo descubrió la innovadora propuesta del Centro de Aprendizaje Intergeneracional.
De hecho, la propia cineasta aseguró que los residentes del “Mount” se transforman completamente en presencia de los niños. Minutos antes que los pequeños lleguen, las personas se ven cansadas, deprimidas y hasta medio vivas. Sin embargo, todo cambia cuando los chicos cruzan las puertas, pues los ancianos reviven.
Cabe señalar que los papás de algunos de los pequeños han tenido oportunidad de presenciar la interacción entre estas dos generaciones, lo que les ha permitido comprender lo que están enfrentando sus propios padres.
Como podrás darte cuenta, esta propuesta no tiene desperdicio. Cada persona involucrada sale beneficiada, por lo que valdría la pena replicar este modelo de guardería en todo el mundo.
¿Llevarías a tus hijos a una guardería como ésta?