No hay mayor angustia que ver a tu hijo enfermo y no saber qué le pasa, sobre todo cuando hace dos minutos estaba perfectamente bien. Ahora no para de estornudar, tose y por momentos pareciera que no puede respirar. No es gripa, así que… ¿qué le pasa?
Lo más probable es que tu pequeño tenga alguna alergia, por lo que habrá que practicarle algunos exámenes que permitan identificar la causa y elegir el mejor tratamiento.
Los alérgenos más comunes son:
AEROTRANSPORTADOS
- Ácaros. Estos insectos viven en el polvo doméstico y se alimentan de los millones de células de piel muerta que nuestros cuerpos eliminan diariamente. Suelen acumularse en la ropa de cama, alfombras y muñecos de peluche.
- Polen. Ésta es una de las principales causas de alergia. Dependiendo del polen al que tu hijo sea alérgico tendrás que adoptar medidas de prevención. Toma en cuenta que los árboles, flores y plantas no polinizan en el mismo tiempo.
- Moho. Estos hongos proliferan en ambiente cálidos y húmedos, tanto en el interior como en el exterior. En casa es fácil encontrarlo en lugares poco ventilados, como baños y sótanos con goteras.
- Animales. Aunque son adorables, las mascotas son portadoras de infinidad de alérgenos. Estos van desde su saliva, hasta el pelaje, pasando por caspa.
- Cucarachas. Por si no hubiera suficientes motivos para odiarlas, las cucarachas son una de las principales causas de asma en niños.
ALIMENTOS
- Huevos. Son los alérgenos más recurrentes en lactantes y niños pequeños. Las proteínas de la clara son la principal causa, aunque algunas personas tampoco toleran las de la yema.
- Pescado y marisco. Las proteínas del pescado pueden provocar diversos tipos de reacciones alérgicas.
- Leche de vaca. Entre el 1% y el 7.5% de los lactantes son alérgicos a las proteínas presentes en la leche de vaca y en las leches infantiles elaboradas con ella.
- Cacahuetes y frutos secos. En caso de que no lo sepas, estos alimentos son los que suelen desencadenar las reacciones más peligrosas, ya que pueden provocar choques anafilácticos y poner en peligro la vida del niño.
- Soya. Entre el 30% y 40% de los bebés que son alérgicos a la proteína de la leche de vaca, también son alérgicos a la soya. El problema es que este producto suele emplearse en la elaboración de diversos alimentos sin que los incluyan en el listado de ingredientes visibles en la etiqueta.
OTROS ALÉRGENOS
- Veneno de insecto. A diferencia de otras alergias, ésta persiste durante la edad adulta, por lo que debes enseñarle a tu pequeño a protegerse de los piquetes de insectos (las abejas y avispas son los más comunes).
- Medicamentos. Los antibióticos son los fármacos que provocan más reacciones alérgicas, pero no son los únicos; así que siempre que ingiera un medicamento nuevo, debes mantenerte atenta para identificar cualquier efecto no deseado.
- Sustancias químicas. Algunas personas son alérgicas a los químicos que se utilizan para fabricar productos de belleza y limpieza.
¿Sabes de algún otro alérgeno que pueda afectar a los niños?
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