El chantaje emocional, este término nos suena a todos nosotros porque, de algún modo, lo hemos experimentado en determinados momentos de nuestra vida. Por ejemplo, en ocasiones lo vivimos con esos familiares capaces de victimizarse para extender sus redes sobre nosotros. También en ciertas amistades que nos manipulan a su antojo con la finalidad de conseguir sus objetivos, los distintos tipos de chantaje emocional que existen dan cuenta de lo complicadas que son esas relaciones, ya que son una manera de hacer que sintamos culpa por lo que ocurrió en el pasado, cuando lo que realmente ha ocurrido no es motivo para sentirse mal con uno mismo, es por eso que hoy te hablare de las formas de chantaje emocional y como identificarlas.
Qué es el chantaje emocional
El chantaje emocional es un arte del engaño y la toxicidad, por lo que detectarla es importante ya que te ayudará a salir de ese bucle de depresión y sufrimiento por el que puedes estar pasando en este momento, lo importante es no dudar y afrontar los hechos que están delante de tus ojos.
La frase de «mejor tarde que nunca» no aplica; yo diría «mejor a tiempo antes de que sea tarde y te puedas arrepentir». ¿Lo estás viviendo quizá en este mismo momento? Es posible. Si es así habrás sentido el dolor lento e incisivo de esos comportamientos ante los cuales, en un principio nos sentimos indefensos. ¿Cómo negarnos?
Por qué somos tan susceptibles
El mayor problema es que muchas veces es tu propia pareja la que causa esto y por amor, miedo o incluso sometimiento son las razones por las que aceptas este tipo de tratos y caes en el error de que es todo por amor, cuando sabes que la realidad es otra.
Formas de chantaje emocional
La seducción chantajista
Es posible que alguna vez hayas conocido a una persona de estas características. En un principio suelen ser hombres o mujeres muy detallistas y amables, atienden cada demanda y saben ser sumamente encantadores. Suelen agasajarte y ser los primeros en hacer cualquier cosa por ti. Pero ten cuidado cada favor y cada detalle deberá ser recompensado y a veces te lo echarán en cara. “Yo te pagué ese viaje” “No puedes negarte ahora sabiendo muy bien todo lo que yo he sacrificado por ti”.
Las víctimas
Sin lugar a dudas, el victimismo es una de las formas de chantaje emocional más común, te usarán como causa de todas las desgracias que le ocurran a él o ella y manipulan las emociones negativas del modo más dañino posible. Comentarios que hacen que te sientas culpable cuando no es así es otro claro ejemplo de las víctimas de la relación, cuidado con este tipo de chantaje ya que muchas veces es difícil de detectar.
Los castigadores silenciosos
Muy sutiles, los castigadores silenciosos ejercen un arte del chantaje emocional de un modo altamente destructivo. En este caso, pueden llevarte a un estado en el que tus emociones estén hechas papilla, te sientas mal contigo mismo y quieras solucionar lo que él está provocando, además tomará cualquier oportunidad para humillarte y si es posible dejarte en claro que tiene todo el control.
Autocastigadores
A diferencia de la otra forma de chantaje, en esta, las personas que lo usan salen con expresiones como las siguiente: “Está claro que ya no me quieres”. Es muy posible que tras oír estas palabras intentemos convencerles de que no es así. Y si lo haces, si renuncias por ejemplo a eso que tanto querías hacer, déjame decirte que has dejado que esa persona gane y puede que repita la estrategia más de una vez, por lo que deberás prestar atención a la forma en como dice las cosas.
Los favores disfrazados de chantaje
Usan a su favor el efecto de psicología social conocido como “pie en la puerta”, por lo general estas personas te pedirán un favor y se aferraran a que lo cumplas sin importar que, se amparan es que solo es un poco más o en que es algo que ya hemos hecho otras veces. Además, aplican la técnica del gato con botas, harán una cara intentando parecer más débiles de lo que son o que el favor que demandan parezca más necesario de lo que es “Sabes que si no fuera necesario no te lo pediría”.
Qué hacer
Estas son formas en las que el chantaje emocional se puede llegar a presentar, sin notas que esto empieza a suscitarse en tu vida, no esperes más debes terminar con esto, ya que el seguir con el chantaje poco a poco ira desmejorando no solo tu salud emocional sino también tu salud física.
Además, si lo consideras necesario puedes acudir a un psicólogo o terapeuta de pareja –según sea el caso– en busca de ayuda, pues muchas veces el problema llega a ser más complejo de lo que parece.
Si vives en la ciudad de México te recomendamos acudas con los expertos de Evolución Terapéutica.
No lo olvides, vales mucho, no debes de dejar que nadie lo ponga en duda.
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