No hay día que no ocurra. Siempre hay algún despistado, o necio, que decide subirse a un vagón del Metro exclusivo para mujeres. Si tiene suerte, un policía lo invitará a bajarse, de otra manera el desafortunado sujeto será sacado por las ocupantes de la unidad entre gritos y golpes.
Lo que el sujeto seguramente ignora es que abordar alguno de los vagones exclusivos para mujeres lo hace acreedor a una multa y horas de detención. ¿Tú lo sabías? Si no es así, será mejor que sigas leyendo.
La fracción XI, del artículo 26 de la Ley de Cultura Cívica del Distrito Federal considera infracción el “ingresar a zonas señaladas como de acceso restringido en los lugares o inmuebles destinados a servicios públicos, sin la autorización correspondiente o fuera de los horarios establecidos”.
Quienes cometen esta falta se hacen acreedores a una multa por el equivalente de 21 a 30 veces la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México (71.68 pesos); es decir, la sanción va de los 1,526 a los 2,150 pesos. En caso de que no pueda cubrirse este monto, se impondrá un arresto de 25 a 36 horas.
Endurecen medidas
Aunque la separación de vagones se realiza desde la década de los ’70, este año se endurecieron las medidas. El problema es que son pocos los usuarios que las conocen, por ello aquí te explicamos en qué consisten. ¡No vaya a ser que te agarren desprevenido!
- En 1970 se asignaron dos vagones para uso exclusivo de mujeres
- En el 2000 se establecieron horarios para la separación de vagones en las líneas 1,3,7,8,9 y A. Ésta sería de 6:00 a 10:00 horas y de 17:00 a 22:00 horas.
- En 2007 se asignó un tercer vagón para uso exclusivo de las mujeres.
- Desde abril de este año, el horario de separación se amplió. Ahora es de 5:00 a 24:00 horas, de lunes a domingo.
Aunque en teoría los policías sólo multaran a los hombres que se nieguen a abandonar el vagón o adopten una conducta agresiva, más vale que no te arriesgues.