El cuerpo de la mujer siempre ha sido objeto de control, es decir, quienes tienen menos poder sobre él son las propias mujeres. Con el pretexto del culto a la belleza, se fijan estereotipos de lo que es un cuerpo atractivo a los cuales intentan ajustarse la mayoría de ellas y llegar a sufrir cuando no cumplen con el modelo. Paradójicamente, todo en la sociedad está diseñado para que otras personas vean sus cuerpos y, sin embargo, a las propias mujeres se les educa desde la infancia a no verlo ni explorarlo. Para contribuir al respeto y cuidado de tu cuerpo, vamos a platicar sobre una de las maravillas del cuerpo humano: El Ciclo Ovulatorio y Menstrual.
Cada mujer nace con un número determinado de óvulos inmaduros en sus ovarios, los cuales en el inicio de la adolescencia por influencia hormonal empiezan a madurar. Los cambios en tu cuerpo empiezan poco antes o poco después que presentas tu primera menstruación.
Los días de duración de la menstruación que se consideran “normales” van desde los dos hasta los 8 días y la cantidad del flujo menstrual puede ser variable, siendo más abundante en los 3 primeros, disminuyendo poco a poco hacia el final del ciclo. Para que puedas saber con exactitud la duración de todo tu ciclo menstrual, cuenta como PRIMER DIA el mismo en que empieza tu menstruación. Tus sensaciones y sentimientos pueden variar en estos días: algunas mujeres refieren malestar general, dolor localizado en el “bajo vientre” que es la zona de tu vello púbico o un poco arriba, disminución del deseo sexual… Otras mujeres lo viven sin molestias, e incluso con un aumento en el deseo sexual y en otras es tan fuerte la molestia o el dolor que incluso tienen que permanecer en cama. Algunas mujeres pueden vivir la menstruación con disgusto, coraje, pena, o como algo sucio, lo que dificulta que acepten su cuerpo y las funciones de éste. Mucho de esto tiene que ver con la información previa a su primera regla (lo que se llama menarca) y los mensajes que fue recibiendo de mamá, hermanas o amigas al respecto.
Desde el primer día de tu menstruación, dentro de tu útero el endometrio empieza a crecer gracias al efecto de los estrógenos. Al mismo tiempo, uno de tus ovarios va madurando un óvulo, el cual se prepara para salir y viajar por la trompa de Falopio. Esto sucede en los primeros 14 días a partir de tu primer día y justamente al DIA 14, sucede la expulsión del óvulo por tu ovario, proceso que se llama OVULACIÓN. Generalmente el flujo vaginal antes y después de la ovulación es una especie de líquido o moco semi amarillo casi transparente que al tomarlo entre las yemas de tus dedos y estirarlo se rompe. En la OVULACIÓN, el flujo se hace transparente y “chicloso”, es decir, que al tomarlo entre las yemas de tus dedos y estirarlo se alarga como liga o chicle, lo cual permite confirmar que estás ovulando. Otro cambio de tu cuerpo en la ovulación es el aumento de temperatura; para saber esto tienes que tomarte la temperatura con un termómetro oral o axilar todos los días inmediatamente antes de levantarte, en la ovulación tu temperatura se eleva entre 0.2 y 0.8 grados.
Con todas estas señales, te puedes dar cuenta que estás ovulando y, lo que es importante, es que en estos días es cuando están puestas todas las condiciones para QUE QUEDES EMBARAZADA, es decir, tu periodo FERTIL. El promedio de vida de un óvulo es de 1 a 3 días y el promedio de vida de los espermatozoides es de 1 a 2 días; como hablamos de promedio, siempre hay que dejar margen de error, por lo que SI NO DESEAS EMBARAZARTE, es recomendable SIEMPRE el uso del condón
Después del día 14, si no es fecundado el óvulo por un espermatozoide, el endometrio reduce su tamaño y hacia el día 27-30, es decir, uno o dos días antes de tu siguiente sangrado, se empieza a desprender, para salir en la forma que ya conoces. Si te preguntas qué sucede con el óvulo no fecundado, pues en ocasiones puede salir con la menstruación y en otras ocasiones se deshace dentro de tu cuerpo.
Si tu ciclo menstrual es “irregular”, es decir, que dura más o dura menos de 28-30 días, será difícil identificar tu ovulación con bastante precisión y es recomendable tener más precauciones y utilizar además del condón un método anticonceptivo regular.
Darte cuenta de las características de tu flujo requiere de tocar tu vulva y tu vagina. Recuerda que todo tu cuerpo es valioso, importante y debe ser atendido y conocido. La mejor manera de resolver tus dudas es observándote; puedes tener un espejo y ver tu cuerpo, disfrutarlo y tocarlo, puedes observar tus órganos sexuales también y conocerlos, son parte de ti. Date la oportunidad de vivir tu sexualidad plenamente. Tu cuerpo te lo agradecerá y tú también.
Irene Torices Rodarte