En cierta ocasión salí de campamento con un grupo de amigos, y una de mis amigas llevó a su hija de tres años de edad. Nos encontrábamos todos platicando cerca de nuestra cocina improvisada, bajo la protección de una lona que hacía de sombra. Sobre el pasto, había un costal con papas y encima del costal un comal. Me sorprendió ver a la pequeña tomar un poco de sal y un huevo crudo, la bebé esparció sobre el comal la sal y después quebró el huevo ahí. El hecho me pareció divertido y lleno de ternura.
También me puse a reflexionar ¿Cuántas veces habría preparado mi amiga huevos estrellados en frente de su hija? Quizá pocas, o tal vez era el desayuno favorito de la madre. Lo que sí es cierto es que los niños también aprenden por imitación.
Quizá eres de esos padres que procuran no decir groserías en frente de tus hijos, pero… ¿cuántas veces te han escuchado mentir? ¿cumples las promesas que les haces?
Los hijos aprenden de todo lo que ven, sea bueno o malo ellos lo imitan, por esa razón debemos procurar enseñarles cosas positivas. Sabemos que nadie es perfecto,
Hacer Familia dice que en un ambiente familiar conflictivo donde hay escases de muestras afectivas crecerá un hijo con conductas negativas.
¿Qué hacer?
Ten en mente que eres un modelo a seguir, ellos aprenderán de lo que hagas. Cambia tu modo de ser para bien, así enfocarás su atención en cosas positivas.
Si quieres mejorar la influencia que tienes en tus hijos, lo primero que debes hacer es ganarte su confianza. Demuéstrales apoyo y ofréceles seguridad, que además de ver a un padre, vean en ti a un amigo, sin olvidar el respeto que deben guardarte.
Recuerda ser firme en tus decisiones y explícales siempre las consecuencias de las cosas, sean buenas o malas. Ese tipo de conversaciones los ayudará a razonar.
Evita los apodos, aunque sea de cariño, y evita insultarlos o decirles que “no sirve para nada”, el dialogo constructivo y con amabilidad fortalecerá su autoestima y mejorará su conducta y habilidades. Es mejor hablar inteligentemente que gritar.
Pasa tiempo con tus hijos. No puedes influir positivamente si no pasas tiempo con ellos, trata de conocerlos más, saber sus gustos, sus preocupaciones, sus pasiones. La convivencia familiar fortalece la unión.