Ya sea como fuente de información o entretenimiento, la televisión es un referente obligado en nuestra vida diaria. Muchos momentos históricos serán recordados por las imágenes que se presentaron en esa pequeña caja electrónica.
Incluso, nuestras vidas han estado marcadas por personajes con los que nos hemos identificado con el paso de los años. ¿Qué hubiera sido de tus años de escuela si no hubieras tenido a Malcom el de en medio, Dawson’s Creek, Los Expedientes X y Friends?
Y aunque nosotros también amamos esos programas, no podemos negar que las producciones televisivas están viviendo su época dorada. Gracias a los avances tecnológicos y al talento histriónicos de cientos de actores, hoy en día podemos disfrutar de series tan realistas, que han desatado auténticos fenómenos culturas.
El mejor ejemplo de ello es Game of Thrones, una serie que ha roto records de audiencia, y que ha dominado las tendencias en todas las redes sociales.
Desde luego, nosotros también morimos por saber quién se quedará con el Trono de Hierro, pero esta producción de HBO no es la única serie a la que somos adictos. Nuestro catálogo también incluye:
- How I Met Your Mother (Cómo conocí a su madre). Aunque la serie terminó hace dos años, el público aún debate sobre qué tan acertado fue el final. Para muchos, el hecho de que Ted Mosby quedara viudo, y que su relato fuera sólo un pobre intento de explicar a sus hijos que seguía enamorado de Robin Scherbatsky arruinó por completo la historia que siguieronn durante nueve años. Pese a ello, no podemos negar que más de uno hubiéramos querido estar en MacClaren’s y escuchar a Barney Stinson decir “This is gonna be legen…wait for it…dary” (Esto va a ser legen… espera… -dario).
- Orange is the New Black. Ésta serie es el segundo gran éxito de Netflix. Tras cuatro temporadas, el público sigue a detalle lo que ocurre con Piper Chapman y las demás internas de la Penitenciaria Litchfield. Este programa causa tal nivel de adicción, que lo propios críticos han caído a sus pies. En poco más de dos años, la producción de Jenji Kohan ha recibido múltiples nominaciones a los premios Emmy, Golden Globe y los de los sindicatos de Escritores y Productores.
- The Walking Dead. ¿Qué podemos decir de este programa que no sepas? Tal ha sido su impacto, que no sólo dio paso a una precuela, Fear the Walking Dead, que también se encuentra entre las series más vistas en los últimos años; sino que los Estudios Universal decidieron crear una atracción completamente inspirada en el apocalipsis zombi.
- The Big Bang Theory. Gracias a Sheldon, Leonard, Howard y Raj, los nerds se pusieron de moda. Los cerebritos adictos a los cómics dejaron de ser vistos como perdedores sociales, y hoy en día son considerados modelos a seguir. A pocos meses de que salga al aire lo que promete ser la última temporada, los fanáticos ansían ver qué sucederá entre Amy y Sheldon, después de que su relación llegara al plano sexual. Sobra decir que parte del éxito de esta producción es la presencia de destacados invitados, como: Stephen Hawking, Adam West, Carrie Fisher y Leonard Nimoy.
- Glee. Y si hablamos de rechazados sociales, no podemos dejar de mencionar este programa que puso de moda los grupos corales. Pese a que el programa no logró sobrevivir la transición de sus personajes de la preparatoria a sus primeros años de universidad, Glee se mantiene como uno de los programas consentidos del público. Aunque debemos admitir que la sorpresiva muerte de Cory Monteith, uno de sus protagonistas, tiene que ver mucho en ello.
- Breaking Bad. Con sólo cinco temporadas, esta serie es considerada una de las mejores de todos los tiempos. Más allá de la novedosa trama y el realismo de las escenas, este programa será recordado por poner a Bryan Cranston en el mapa. Antes de Walter White, el actor era considerado un simple actor de comedia. Hoy en día, Cranston cuenta con varios premios Emmy y una nominación al Oscar. Cabe señalar que el impacto de la serie fue tan grande, que Netflix decidió producir el spin-off, Better call Saul; y en Latinoamérica se hizo el mal logrado remake: Metástasis.
- House MD. “Todos mienten” (Everybody lies) Con esa premisa, cada semana y durante nueve temporadas, Hugh Laurie conquistó al público de todo el mundo al demostrar que el detalle más insignificante permite develar el misterio más complejo. Por supuesto, Gregory House no sólo nos cautivó por sus conocimientos, sino por su personalidad conflictiva, sarcástica, manipuladora y propia del antihéroe más grande de todos los tiempos.
- House of Cards. Lo que se consideraba un simple remake de una exitosa serie británica cambió para siempre la forma de hacer televisión y colocó a Netflix como el principal proveedor de entretenimiento a nivel mundial. ¿La razón de su éxito? Francis Underwood (Kevin Spacey) el presidente de Estados Unidos que bien podría ser la representación de cualquier político enfermo de poder.
Por supuesto, existes muchas otras producciones de TV que se han convertido en referentes culturales, pero éstas son nuestras favoritas. ¿Cuáles son las tuyas?
¿Sabes cuáles son las series más exitosas en Netflix? Haz click aquí para descubrirlo.