Los niños que va a las guarderías se enferman más, tienen un mayor riesgo de pescar enfermedades e infecciones que los niños que se quedan en casa, la razón es muy simple, tienen mayor contacto con otros niños, y la mayoría de los pequeños tienen un sistema inmune poco desarrollado.
Los pequeños que visitan las guarderías están más expuestos, muchas estancias infantiles mantienen a los niños en pequeños salones, lo que hace más fácil que un pequeño contagie a otro, el riesgo a enfermarse se duplica o se triplica.
SABIDURÍA QUE AYUDA: Una investigación realizada en Zamora, España, llegó a la conclusión de que los niños que van a la guardería tienen un riesgo de entre el doble y el triple, que el resto de los niños, de contraer enfermedades. Los datos sirvieron para valorar si había más riesgo de contraer infecciones agudas de tipo respiratorio como catarros, bronquitis y neumonías, y de tipo digestivo como gastroenteritis. Los investigadoes encontraron que un 35% a un 50% de las infecciones que padecen los niños se deben a que acuden a una escuela infantil. También se descubrió que un 10 y un 20% de los episodios de bronquitis, catarros, faringoamigdalitis o gastroenteritis en todos los niños vienen motivados por la existencia de las guarderías. El doctor Carlos Ochoa aclara que no se trata de «demonizar» las guarderías, sino más bien de cuantificar el problema y plantear ideas de prevención, como mejorar la higiene.
El estudio también tiene como objetivo ayudar a los padres a la hora de tomar decisiones relacionadas con los niños, sobre todo cuando los padres desean elegir una de varias alternativas a la hora de tomar decisiones sobre el cuidado de los niños. Si la única opción es llevar a tu niño a una guardería, la recomendación es aumentar las medidas de higiene.
Por otra parte, no sería tan mala idea llevara tus hijos a las guarderías, otro estudio publicado en la revista Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, indica que los niños de guarderías con seis o más niños, se enferman menos cuando entran a la escuela primaria, pues en estas instancias infantiles se van haciendo inmunes a muchos de los virus responsables del resfrío común. A los 2 años de edad, los niños que van a guarderías se enferman el doble que los que se quedan en casa, pero cuando tienen entre 6 y 11 años, los que asistieron a guarderías cuando eran bebés tenían una notable ventaja sobre los pequeños que estuvieron en casa, pues se resfriaban un tercio de lo que se enfermaban los que no fueron a una guardería. La ventaja desaparece a los 13 años de edad, a esa edad las cosas se nivelan. El doctor Thomas M. Ball, autor del estudio, dijo que estos hallazgos pueden servir a los padres para evitar los sentimientos de culpa al inscribir a sus hijos en guarderías, que los progenitores deberían de pensar que el sistema inmunológico de su pequeño está aprendiendo.