Desde su lanzamiento en julio pasado, Pokémon Go es un verdadero fenómeno cultural. Lugar al que vayas, lugar en el que encontrarás a algún jugador intentado atrapar a Bulbasaur, Squirtle, Charmander y demás pokémones.
En ocasiones, a los pokémones les da por aparecer en los lugares menos convenientes, como el escritorio de la sala de juntas, durante una reunión con los clientes; en el baño de mujeres o hasta en cementerios.
Aunque raras, estas ubicaciones no representan un peligro para tu integridad, pero muchas otras sí. De hecho, en la Ciudad de México corres el riesgo se ser asaltado, golpeado o algo peor, sólo por subir de nivel.
Algunas de estas zonas, en las que definitivamente, no debes intentar cazar pokémones son:
- Tepito. El Barrio Bravo es conocido por su nivel de inseguridad- No te recomendamos que camines por sus calles con el celular en mano.
- Agrícola Oriental. De acuerdo con la Policía de la CDMX, ésta es la segunda colonia con mayor índice de delictiva. Mejor evítala.
- Metrobús Buenavista. Éste es uno de los cruces más peligrosos. Tan sólo en 2015 se reportaron 79 robos, por no hablar de la posibilidad de que te atropellen
- La Merced. Aunque en esta zona puedes conseguir muchos productos a precio accesible, será mejor que no intentes hacerte de pokémones en ella. Además de ser uno de los más inseguros de la CDMX también es un conocido centro de prostitución. ¡No te vayan a confundir!
- Reforma. Por supuesto, es la principal avenida de la Ciudad, y aunque es posible que encuentres varios pokémones en ella, también suele albergar todo tipo de manifestaciones. En un abrir y cerrar de ojos puedes perderte en la multitud. Por no mencionar que resultes golpeado, te roben el celular o seas víctima de tocamientos.
- Helipuertos. Cada vez más construcciones cuentan con este tipo de terminales aéreas, y aunque a vista debe ser impresionante, no querrás distraerte con el celular y caer al vacío.
Asimismo, te sugerimos que evites los andenes del Metro, por aquello de que se caen a las vías; los centros de transferencia y paraderos de transporte colectivo. Recuerda que estos últimos suelen ser frecuentados por amigos de lo ajeno.