Hace unos días una amiga me pidió que nos tomáramos un café para contarme una serie de eventos que comenzaron a suceder en su noviazgo; primero, su pareja en una relación de más de dos años, le empezó a cancelar las citas por supuestas juntas de trabajo sorpresivas que tenían lugar casi siempre después de las 9pm, o sea, fuera de horario laboral; posteriormente los fines de semana él no tenía ganas de nada, ni siquiera de ir al cine, y en cuanto a comidas fuera o eventos que implicaran convivir con más personas, él la tachaba de incomprensiva, de que nunca le importaba en realidad lo que él sintiera, que tenía semanas de verdadero exceso de trabajo y ella no tenia el mínimo sentido común como para darse cuenta de que estaba realmente cansado, etcétera. Por lo tanto, eso estaba haciendo mella en la relación, cuestión que preocupó sobremanera a esta chica, y entonces por miedo a perderlo, dejó que se hiciera la voluntad de él. Y, ¿cuál era su interés? Ninguno, él ya no quería hacer nada, así que los siguientes meses que fueron de horror, ella estuvo diciendo que sí a todo, y aceptando el: no te veo, no salimos, no comemos, no hacemos planes, nada en absoluto.
Un buen día, ella trató de acercarse de manera muy respetuosa y, casi rogándole que fueran a tomarse algo, se ofreció a ayudarle económicamente por si él tenía algún problema; aún así no consiguió mucho; debo mencionar que para este momento de la plática, yo no le estaba haciendo una lectura de pies o de rostro, no me quería colocar en el lugar de vidente, pero era obvio que el muchacho tenía claramente sus intereses en otro lado, por lo que le hice una pregunta que la movió demasiado y hasta se enojó: ¿podrías decirme hace cuanto tiempo tu enamorado y tú no tienen intimidad?, en un principio me respondió: ¿eso qué tiene que ver?, ¿por qué me haces esa pregunta?, a lo que le contesté: porque pienso que desde hace meses te engaña y no ha tenido el valor de decírtelo; sin embargo, no se decide a dejarte del todo por si las cosas con la nueva persona no salen como él las tiene previstas, así que prefiere mantenerte cerca para que a la menor provocación de la otra chica, él regrese a tus brazos, o bien, hasta que tú te canses y des por terminada la relación, pues de esta manera, ya no tendría dos culpas, la de engañarte y la de dejarte. Además, piensa bien le dije, en qué empresa con ejecutivos de alto nivel se hacen juntas sin previo aviso cada tercer día, y no hay una planeación previa de las actividades con personas de otras áreas, eso me suena muy ilógico, pues en realidad no es que él se haya llenado de la noche a la mañana de exceso de trabajo, lo que veo es que tú no has querido dejarlo por miedo a no tener pareja; te resistes a vivir sin una compañía y lo que es peor, él te ha cortado el privilegio de la sexualidad y tú aún sigues ahí.
Las relaciones están constituídas por muchas cosas, agregué, y entre las más importantes, está la verdad que da lugar a una cercanía mayor, a más mentiras más lejanía, así que esas señales inequívocas de que no quiere estar contigo por ningún motivo es porque hay gato encerrado, por lo que te recomiendo no permanecer ahí ni un minuto más; debes darte cuenta de el valor que tienes y no permitir que tu pareja te genere una crisis de autoestima que nada tiene que ver contigo, sino con sus desiciones, así que ten confianza, toma una decisión y no permitas que te pongan una cerca para que no te acerques valga la redundancia, tú pon un alto y, si me preguntas si te quiere o no te quiere, te contesto con otra pregunta, ¿tú te quieres?, porque si en verdad te aprecias, entonces no permitas que nadie te lastime y te haga sentir mal, de ahí no va a resultar nada bueno, sal de esa situación tan pronto puedas y te aseguro que vas a encontrar a alguien que sea capaz de valorarte de la misma manera que lo haces contigo misma, es mejor decir la verdad que mentirle a tus amigos. Sé que no le gusto lo que le dije, pero tenía que hacerlo y es para su bien.
Que tengas una bendecida semana.