El sexo anal guarda toda una serie de mitos e ideas, mismas que en su mayoría son falsas. Te contamos más sobre esta práctica sexual.
No debe ser incómodo
Uno de los grandes mitos del sexo anal es que este tiene que ser incómodo, pero no es así. Siempre y cuando exista la correcta lubricación y estimulación, esta será una actividad satisfactoria para ambas partes.
Es sucio
¡No! Aunque este se encuentre en una de las partes del cuerpo donde se expulsan los residuos, lo cierto es que no tiene porque ser sucio.
Se recomienda realizar una lavativa antes con un enema para que no ocurra ningún accidente.
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Puede transmitir infecciones
Al igual que la penetración vaginal, aquí también se guardan bacterias, por lo que se recomienda tener mucha higiene, así como el uso de preservativo, el cual incluso ayudará a la penetración. Lo cierto es que al estar en el ano, sí existe mayor riesgo de contraer una infección, por lo que hay que ser más cuidadoso.
Sólo lo practican los homosexuales
En realidad esta es una práctica que se puede hacer también en parejas heterosexuales, aunque sí es más común en las parejas gay. Aún así todos pueden disfrutarlo.
El ano se hace grande
Esto es falso, el ano es un músculo que puede regresar a su tamaño normal.
Estos fueron algunos mitos del sexo anal que seguro cambiarán tu visión y si deseas practicarlo, no olvides comentarlo con tu pareja, así como el uso de lubricante, juegos previos, balas o toda clase de objeto que ayude a estimular para que sea placentero.
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