¿Te consideras buena en la cama?
Sabemos que hombres y mujeres son seres sexuales por naturaleza; sin embargo, por cuestiones culturales, las mujeres suelen reprimir ese lado de su personalidad. Esto les impide disfrutar al máximo su vida sexual y hacerse preguntas tan básicas como: qué me gusta y qué tan buena soy en la cama.
Si le hicieras esa última pregunta a un hombre, su respuesta estaría entre “soy un dios del sexo” y “soy el mejor amante del mundo”; mientras que la mayoría de las mujeres se mostrarían más inseguras y se limitarían a decir “lo normal” o “nadie se ha quejado”.
Como queremos que tú como mujer te sueltes el cabello, valora tus habilidades en la cama, aquí están algunas señales a las que debes prestar atención para saber si estás haciendo bien las cosas:
¿Cuáles son las señales?
- Manos. Estas partes del cuerpo te dirán si tu compañero ha disfrutado el encuentro sexual. Si tras el orgasmo ves que él aprieta las manos, puedes estar segura de que el sexo fue placentero. Esto se debe a que, con la excitación sexual, mucha de la sangre de nuestras extremidades fluye hacia la zona genital, por lo que sus brazos y piernas se sentirán acalambrados. Apretar las manos es un movimiento involuntario del cuerpo para que la sangre regrese rápidamente.
- Innovar. Si tus encuentros sexuales son siempre iguales, no tardarán en volverse aburridos. Por ello, los hombres disfrutan más cuando el sexo es espontáneo. Si quieres volverlo loco, es importante que en ocasiones tomes la iniciativa y sugieras nuevas posiciones.
- Anatomía. Para ser buena en la cama tendrás que desempolvar tus conocimientos de anatomía y descubrir las zonas erógenas de tu pareja. Aunque el pene juega un papel importante en este juego, no puedes olvidarte de su cuello, piernas, abdomen y hasta los testículos. Si sabes estimular adecuadamente cada una de estas zonas, puedes considerar que eres una buena amante.
- Complaciente. Aunque es importante que te preocupes de pasarla bien, no puedes concentrarte exclusivamente en tu placer. Es importante que aprendas a distinguir las cosas que le gustan, créenos que mientras más disfrute el sexo, mejor la pasarás en la cama.
- Comunicación. Como siempre, la comunicación es indispensable. Si eres incapaz de compartir tus inquietudes, gustos, deseos y temores en la cama, difícilmente la pasarán bien los dos. Si adoptas una actitud pasiva durante los encuentros sexuales, seguramente terminarán como malas experiencias para los dos.
Así que… ¿qué tan buena eres en la cama?
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