Tus hijos observan cada uno de tus movimientos, miran cómo tratas a tu pareja y cómo te comportas con tus padres. En esta ocasión nos enfocaremos a la forma de tratar a tus padres. Lo que hagas y lo que dejes de hacer como padre no sólo repercute en el futuro de tus hijos, sino también en el tuyo. ¿En el tuyo? Por supuesto que sí, ¿cómo te vez en unos 40 o 50 años? La forma en cómo trates a tus padres en la vejez se acerca mucho a la forma en que tus hijos te tratarán cuando estés viejo. Parece una forma egoísta de ver las cosas, pero es verdad, si tú te olvidas por completo de tus padres es casi seguro que tus hijos sigan el mismo patrón y te olviden en una casa o en un asilo.
Pero el punto no es cuidar a tus padres con el afán de que te vaya bien en tus últimos años de vida, más bien todo tiene que ver con el agradecimiento. Estar agradecido con tus padres por los cuidados que te dieron cuando eras pequeño es cuidarlos y protegerlos, es darles un estilo de vida digno y respetable.
Si tus padres no viven contigo destina un poco de tu presupuesto para llevarles ayuda de forma periódica, visítalos con frecuencia y procura que tengan todos los servicios necesarios. Si viven contigo no te olvides de apartar un poco de dinero para los gastos médicos o caseros de tus padres, ámalos y trátalos con amor y respeto. Muchos mexicanos no ganan el dinero suficiente como para alimentar una boca más, ahora imagina a un viejo o un par de viejos que les cuesta trabajar, esa debería ser una mayor razón para que los padres en edad avanzada vivan con sus hijos, pues se encuentran en una situación de vulnerabilidad. Procura apartar un poco de tu presupuesto para tus amados viejos.