La orientación relacional es un término relativamente nuevo y no muchas personas son conscientes de lo importante de es saber su propia orientación relacional, y para que te des una idea, es tan importante como saber tu orientación sexual. No desesperes que ahora mismo te decimos qué es y para qué sirve.
Qué es la orientación relacional
En palabras muy contundentes, es una forma de entender cómo establecemos nuestras relaciones sexosentimentales o sexoafectivas.
Tradicionalmente contamos sólo con un tipo de orientación relacional y esta es la monogamia, donde un individuo debe de dirigir todas sus muestras de afecto románticas, eróticas y sexuales a la misma persona.
El problema radica en que hay individuos que no necesariamente se sienten atraídos o conformes con este tipo de prácticas y tienen una fuerte tendencia a la no-monogamia o polígama, por lo que buscan la no exclusividad sexual y/o emocional, apelando a la sensación de que una sola persona no precisa satisfacer todas sus necesidades y así ocupar un lugar íntimo en su vida.
Tipos de orientación relacional
Relaciones Monógamas
Son las relaciones afectivas en las que se mantiene un vinculo sexual sólo con una pareja, teniendo una exclusividad
Relaciones No-monogamias gámicas
Son las relaciones afectivas en las que se forman parejas, pero sin una exclusividad sexual o afectiva. Aquí es común encontrar parejas que se sienten cómodas en el mundo swinger o de intercambio de parejas, personas liberales, en relaciones abiertas, de poliamor jerárquico, poliamor no jerárquico y de anarquía relacional.
Relaciones No-monogamias no gámicas
Son las relaciones afectivas que rechazan la idea de formar una pareja por lo que el único modelo a seguir es la agamia, siendo completamente opuesto a la monogamia.
Cómo saber cuál es tu orientación relacional
A grandes rasgos, se puede decir que tu historial en relaciones de pareja tiene la respuesta:
Cuando has estado en una relación monógama ¿has sentido angustia por pensar que sólo estarás sexual y afectivamente con una persona?, ¿has sentido una fuerte atracción sexual y afectiva hacia otras personas estando en una relación monógama?, ¿has sido infiel en más de una ocasión?, ¿tus relaciones duran muy poco (meses) y casi al término de éstas ya te estás relacionando nuevamente?
Si la respuesta a muchas de las preguntas anteriores fue «NO», entonces eres una persona monógama. Pero si la respuesta fue «Sí», entonces debes saber que es muy probable que seas polígamo o poliamoroso.
Aquí te dejamos un video en el que puedes contestar una serie de preguntas muy puntuales para sabe exactamente cuál es tu orientación relacional ideal y saber si eres: swingering, poliamoroso, liberal, anárquico relacional, etc.
Ahora que ya descubriste por qué tus relaciones no habían funcionado del todo, te será más fácil disfrutar de tus parejas y ellas de ti.
Y si tienes una pareja monógama y descubriste que eres polígamo, te recomendamos no ocultarlo y buscar la manera de platicarlo juntos. Apóyense de algún experto como terapeutas y sexólogos, y busquen llegar a un acuerdo.