Si pudiera ofrecer un consejo a los jóvenes sería el siguiente: No dejes que tu pasión se extinga, pues es el combustible para construir la vida de tus sueños.
Desconozco cómo me considerarías si me conocieras y qué factores usaría tú mente para determinar si soy joven o no, sin embargo a mi edad he tenido una vida muy rica en experiencia e introspección, lo que ha traído como consecuencia sabiduría y aprendizaje de importantes lecciones.
A continuación comparto contigo querida, querido lector algo que me hubiera gustado que alguien me compartiera cuando empezaba a hacer mi camino en el mundo:
“No permitas que se extinga tu pasión. ¡Protégela!”
Desconozco si es la pasión lo que lleva a construir grandes imperios o lleve a memorables aventuras; lo que sí puedo decir es que es la pasión lo que nos hace vivir con intensidad este camino llamado vida, lo cual hace de la pasión un recurso sumamente preciado.
Lamentablemente, en el camino, la pasión podrá ser considerada un estorbo, una amenaza y ya sea de manera intencional o negligente, tu pasión puede verse en riesgo de ser apagada. La pasión debe ser protegida, de lo contrario puede ser regulada, disminuida o hasta apagada por personas que no quieren verla.
Razones de amenaza:
- Es una fuerte energía que provoca además de entusiasmo, una especie de brillo intenso y esto puede ser un triste recordatorio de lo que alguien alguna vez tuvo y le ha sido imposible recuperar.
- Lleva a realizar cosas de manera más fuerte, con mayor alcance y sin duda más rápido, y esto también puede representar una amenaza para quien realiza las mismas cosas de manera más lenta y sin ese punch.
- En fuente de levantamiento y acción en el entorno y para quien se ha acostumbrado a no esforzarse pudiera ser vista como incomoda.
- Lleva a aventurarse a soñar y nuevas formas de hacer las cosas y para alguien que no practica la innovación o emprendimiento, resulta motivo de temor o riesgo.
Con esto, lo que quiero detallar es que existirán momentos donde te encuentres brillando con un sueño o proyecto que nació de tu pasión y cuando se rebota con alguien cuya llama de pasión está apagada o muy tenue, es posible que rechace aquello que le representa una falta o incomodidad y si no la proteges, se puede perder un gran activo en tu vida.
Ahora, es muy fácil señalar al individuo gris y sin pasión como un ente amenazante, pero recuerda que eres tú el/la responsable de ese cuidado.
Una vida sin pasión es un paso del tiempo sin emoción y probablemente sin propósito. Descubre que es aquello que te apasiona. Encuentra esos pasatiempos, trabajos, proyectos, causas o personas que despierten tu pasión por la vida ¡Y asegúrate de que solo crezca!
Columna escrita mientras se escucha – y canta al gran y talentoso Emmanuel.
Una corona para ti,
Angie D. Brenes
Twitter: @angiebrenes
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