Tú ¿Qué tanta importancia le das a los encuentros sexuales en tu vida? Sí, del 0 al 10, qué tan importante es.
Sin importar la puntuación que le hayas dado, cuando sí estás con alguien… ¿qué es eso que hace que valga la pena? Es decir, qué es lo más disfrutable para ti.
Para muchas personas es el placer en sí mismo, la búsqueda del orgasmo, el despertar de nuevas y diferentes sensaciones. Para otras, simplemente el siguiente paso en una relación sentimental; para otras más, el punto de unión espiritual entre dos personas.
Auténticamente no hay bueno ni malo, pero sí creo que sería importante que te lo preguntaras porque para cada uno de nosotros es diferente y varía según el contexto y por qué no, también nuestro momento de vida. No siempre estamos en el mismo mood ni buscando lo mismo.
Muchos de los problemas vienen porque no NOS escuchamos, pasamos por encima de nuestros propios límites para que la otra persona no se vaya, no nos juzgue, no nos deje de querer, etc. No sé si estoy logrando ser clara, pero me encantaría que pudieras sentir que la persona más importante de tu vida, ERES TU.
No se trata de ver por mí y olvidarme del mundo, pero sí de ponerme en primer lugar y desde este lugar de importancia (porque es mi vida y me toca a mí decidir por mi), negociar y decidir lo que es mejor para mí.
Estar con alguien puede ser un momento mágico, de conexión, complicidad, goce y escucha; pero también puede ser el calvario diario que “tengo que” atravesar, porque es mi deber, porque es lo que se espera de nosotros –aplica para hombres y mujeres-, porque es lo “correcto”, etc.
Hoy, me encantaría que te dieras chance de preguntarte, pero sobretodo de quedarte contigo… y escuchar tus respuestas. ¿Qué es lo que más disfruto? ¿En que mood me siento hoy? Y si hoy sólo quiero acurrucarme, está increíble… date permiso de pedirlo y hacerlo. Sí la cosa es más salvaje, ¡adelante! Quizás mañana quieras ver a tu pareja a los ojos mientras estás con ella y no quitarle la mirada ni un minuto… no lo sé, pero seguramente tu tampoco. ¡De eso se trata! Cada encuentro tiene su encanto, cada día tiene su encanto… ¿qué tan abierto es tu abanico de opciones? Qué chido que tengamos nuestra posición o nuestra rutina favorita –sexualmente hablando-, pero mi invitación es: obsérvate, escúchate, prueba cosas distintas, no limites tus opciones; al contrario, busca nuevos horizontes, nuevas sensaciones, nuevas formas de conectarte con el otro.
Si descubres algo distinto, no dudes en contármelo, me encantará saber de qué forma disfrutaste hoy!