Todas las publicaciones especializadas en capital humano hablan constantemente de la necesidad de elevar la productividad laboral, pero pocas veces nos dicen cómo hacerlo y, sobre todo, cómo hacerlo sin morir en el intento.
De entrada, debes saber que ser productivo implica obtener el mayor número de resultados con el menor esfuerzo. Ello requiere que aproveches cada uno de los 1,440 minutos del día, sin que ello implique estar pegado a la computadora las 24 horas.
Para garantizar que cumplas tu objetivo de elevar tu productividad, nos dimos a la tarea de buscar las estrategias que siguen renombrados empresarios, atletas y emprendedores exitosos. Escogimos las mejores:
- Concentración. En vez de tratar de resolver dos o tres problemas al mismo tiempo, debes enfocarte en una sola tarea. Elige la que creas que es la más importante, y dedícale el tiempo necesario para terminarla. Lo más importante es que evites las interrupciones y distractores.
- Pendientes. Si eres de las personas que les gusta hacer listas de pendientes, debes deshacerte de ellas. Ver que tienes que resolver tantos problemas o atender tantos asuntos sólo te generará estrés. En vez de hacer listas, la gente productiva calendariza.
- Procrastinación. Deja de retrasar tus actividades. En vez de pensar en lo que tienes que hacer, cuánto tiempo te llevará realizarlo y los beneficios que obtendrás, mejor HAZLO. Deja viejos hábitos que te quitan tiempo y enfócate en el trabajo que tienes frente a ti.
- Casa. En el momento en el que cruzas la puerta de la oficina para ir a casa debes olvidarte del trabajo. Es necesario que establezcas un sano equilibrio entre tu vida personal y la laboral. Dedícale tiempo a tu familia y amigos. Descansa y jamás atiendas pendientes en casa.
- Email. Probablemente eres una de las personas más solicitadas del mundo, pero no es necesario que revises tu correo electrónico cada media hora. Los minutos que inviertes en esa actividad es tiempo que le robas al trabajo que debes hacer. Establece horarios para checar tu correo. ¡Ah! Y si tu trabajo no requiere que uses redes sociales, evita abrirlas.
- Juntas. Las juntas son el principal asesino de la productividad, pues jamás comienzan a tiempo, se pierde el sentido de lo que se necesita hablar, y se extienden demasiado. Así que para ser realmente productivo debes evitar reunirte con tu equipo de trabajo a cada rato y por cualquier momento. Hazlo sólo cuando sea necesario y asegúrate de que sea breve y vayan al grano,
- Delegar. Para obtener mejores resultados es necesario que delegues tareas. Seguramente, muchos de los pendientes que atiendes pueden ser resueltos por alguien más, así que es necesario que identifiques cuáles son las tareas que requieren toda tu atención y cédele las demás a algún subalterno.
Lo más importante es que dejes de ver el día como una carrera a contra reloj para hacer el mayor número de actividades. Recuerda que es mejor atender dos o tres pendientes que hacer veinte tareas a medias.