Cada día es más difícil encontrar trabajo, y si eres recién egresado, el grado de complejidad se duplica. De hecho, cifras oficiales revelan que la tasa de desocupación entre los jóvenes supera el 8%.
Lo peor es que, de los más de 300 mil jóvenes que egresan cada año de las universidades, sólo 40% obtiene un empleo relacionado con su formación académica.
Si te encuentras en este grupo de población, debes poner mayor esfuerzo para redactar tu currículum. Recuerda que es tu carta de presentación, por lo que es importante que muestre todo tu potencial.
Para facilitarte la tarea, nos dimos a la tarea de recabar los mejores consejos de Ivonne Vargas, especialista en Recursos Humanos y autora del libro ¡Contrátame!:
- Redacción. Es muy importante que tu currículum no tenga errores de ortografía y sintaxis. Te sugerimos que uses el revisor ortográfico y que le pidas a alguien más que lo lea; de preferencia que lo haga en voz alta para detectar las oraciones mal estructuradas.
- Formato. Probablemente creas que usar varias tintas hará que tu currículum llame más la atención, pero debes limitarte a un solo color. Aunque no lo creas, los reclutadores descartan candidatos por el formato de su currículum.
- Información. Debes incluir sólo la información básica: nombre completo, datos de contacto, como teléfono, celular y tu e-mail. Ahórrate los grados académicos, pues entrarás en el escabroso tema de la titulación y las especialidades. Si lo deseas, puedes agregar una red social, pero sólo si ésta da muestra de tus aptitudes laborales. Si te especializas en criticar, hacer comentarios sarcásticos, publicar oraciones o ligar, mejor omítela.
- Estudios. Debes anotar sólo los datos del último grado académico que alcanzaste. Escribe si fue una licenciatura o ingeniería, en dónde la estudiaste y la fecha. Olvídate de citar tus estudios de preparatoria y secundaria; y por favor, jamás hables de la primaria y el jardín de niños. No menciones tu promedio, a menos que hayas obtenido excelencia académica. Si cuentas con un certificado o experiencia internacional, presúmelo.
- Actividades. Contrario a lo que hemos pensado durante años, el currículum de un recién egresado no se limita a los trabajos que realizó durante la carrera. Si quieres destacar de los demás candidatos, es necesario que incluyas todas las actividades extras que realizaste durante tus años de formación. Esto incluye deportes, actividades culturales, cursos, voluntariado, etcétera. No olvides poner las fechas en las que lo hiciste.
- Cualidades. Al ser recién egresado es poco probable que tengas experiencia laboral, por ello te sugerimos que destaques tus cualidades.
- Prácticas. No dejes fuera de tu currículum tus prácticas profesionales y servicio social. Señala la empresa y el periodo en el que estuviste ahí.
- Idiomas y habilidades técnicas. Menciona los idiomas que dominas, y el nivel de conocimiento. No olvides anotar los sistemas y paqueterías que manejas.
Recuerda darle un buen diseño. ¡Tu currículum está listo!