“¡Oh Romeo, Romeo! ¿Por qué eres tú Romeo? Niega a tu padre y rehúsa tu nombre; o, si no quieres, júrame tan sólo que me amas, y dejaré yo de ser una Capuleto”. Seguramente, la obra de la que extrajimos esta frase te ha hecho suspirar más de una vez. No en balde es una de las más populares de la literatura universal.
Lo cierto es que sería imposible concebir las letras inglesas sin la producción literaria de William Shakespeare. Sus obras de teatro han sido traducidas a prácticamente todas las lenguas existentes y montadas en cada escenario del mundo.
Nadie puede negarlo. Shakespeare está más presente que nunca. Resulta casi imposible aceptar que han pasado 400 años de su muerte. De hecho, el próximo 23 de abril se cumplirán los cuatro centenarios de su deceso.
Por ese motivo, y con la fecha a la vuelta de la esquina, nos dimos a la tarea de seleccionar algunas de las frases más representativas de su producción literaria:
- El amor, como ciego que es, impide a los amantes ver las divertidas tonterías que cometen.
- Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.
- Dueños de sus destinos son los hombres. La culpa, querido Bruto, no está en las estrellas, sino en nuestros vicios.
- Oír con los ojos es una de las agudezas del amor.
- Duda que sean fuego las estrellas, duda que el Sol se mueva, duda que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo.
- Lloramos al nacer porque venimos a este inmenso escenario de dementes.
- No temáis a la grandeza; algunos nacen grandes, algunos logran grandeza, a algunos la grandeza les es impuesta y a otros la grandeza les queda grande.
- Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras.
- En la amistad y en el amor se es más feliz con la ignorancia que con el saber.
- El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.
- No existe nada bueno ni malo; es el pensamiento humano el que lo hace aparecer así.
- Un hombre que no se alimenta de sus sueños envejece pronto.
- Hay puñales en las sonrisas de los hombres; cuanto más cercanos son, más sangrientos.
¿Cuál obra de William Shakespeare es tu favorita?