Al convertirnos en padres tenemos la responsabilidad de darles una crianza y educación excelente, pero muchas veces y más en la época de la adolescencia se tornan un tanto conflictivos, toman actitudes agresivas y se alejan de nosotros. Al tratar de entenderlos les damos ciertas libertades de hacer y deshacer a su antojo, que a la larga traen problemas familiares. Por esto hacen una red de aliados que en su mayoría son amigos con quienes comparten gustos.
Muchas veces somos los padres los que nos hacemos los primeros cómplices de nuestros hijos ya que, aunque sabemos que están haciendo cosas malas nos tapamos los ojos. Además, muestran una conducta deshonesta, donde mienten consistentemente, utilizando estas mentiras para estafar a otros y obtener un beneficio personal o solo por placer.
Otras de las conductas que presentan, es la impulsividad o incapacidad para planificar su futuro, se les hace difícil ver las consecuencias de sus acciones y por eso toman decisiones equivocadas e improvisadas. Algunas veces caen en la agresión e irritabilidad. Cuando les mostramos un no rotundo sobre algunas cosas, es cuando hacen su red de aliados.
El prohibirles salir con alguien, ir a algún lugar, salir a ciertas horas de la noche o del día o reunirse con cierto grupo de personas, nuestros hijos se ponen creativos y se las ingenian para hacerlo o como lo mencionamos antes mienten constante mente. Seguramente tiene algún confidente o aliado al cual le cuentan lo que harán.
En esta red de aliados entran amigos, amigas, familiares, novios y por supuesto las redes sociales. Todos estos son personas en las que ellos, por decirlo de alguna manera confían y con las cuales comparten las actividades que realizan o realizarán.
La necesidad de tener aliados es porque con ellos pueden comprender perfectamente lo que les pasa, son personas que se preocupan porque están pasando por lo mismo que ellos y bien pueden reír o hasta llorar juntos, de hecho su relación llega a ser tan cercana que comparten mensajes privados de sus redes sociales
Es por eso que debes conocer a cada uno de ellos o saber quiénes son y cómo se comunican entre ellos, esto para que en una situación de emergencia ellos te puedan brindar datos que tú no sabes, como con quien y donde están.
Nuestros hijos escogen a sus amigos porque son muy parecidos a ellos y una vez que se vuelven amigos influyen los unos en los otros para parecerse más. Esta necesidad es la tendencia de imitar el comportamiento del otro y la influencia de la presión del grupo de iguales. La relación con amigos para ellos es muy importante en su desarrollo, pero esta se puede salir de control llegando casi a la rebeldía total.
Mantener un equilibrio entre sus amigos, sus actividades y la confianza con los padres es difícil pero se puede lograr con el dialogo. Hacernos sus aliados y estar enterado de las cosas que hacen significa para los padres tener datos fundamentales de lo que hacen sus hijos.
Notas relacionadas con aliados de nuestros hijos:
Cómo explicarle a mis papás que mi maestr@ me acosa. Aquí.
Mi hija es adolescente y está embarazada ¿cómo la ayudo? Aquí.
¿Cómo @!&%#¡ pedir permiso y no meterme en broncas con mis jefes? Aquí.