¡Vaya que es una buena pregunta! Si te has enfrentado con este dilema, o justo en este momento te resulta imposible tomar una decisión, sabrás que ambas opciones tienen sus pros y contras. Lo importante es que analices a fondo cada alternativa y no tomes decisiones viscerales.
Si has llegado al punto en que tiene los días contados en esa empresa, vale la pena valorar cuál es la opción que más le conviene a tus finanzas y a tu futuro profesional. El esquema en el que estés contratado también debe ser considerado en tu decisión. No es lo mismo estar trabajando por honorarios y no tener derecho a nada, a formar parte de la nómina y contar con prestaciones.
Cuándo renunciar
Es difícil renunciar a una entrada segura de dinero, pero no es sano permanecer en un trabajo en el que cada día es una verdadera tortura.
Es cierto que no será sencillo encontrar otro empleo, y que hay un grave problema de desempleo en nuestro país, pero… ¿te resulta atractivo lidiar todos los días con personas que no toleras y desempeñar funciones que te aburren por los próximos 20 o 30 años? Si ése es tu caso, ¿no crees que sería mejor comenzar a mirar nuevos horizontes?
Si ya no te sientes a gusto en un lugar, lo mejor es renunciar y empezar a buscar chamba en otro lado. Debes tener confianza en ti, en la experiencia y conocimiento que has adquirido. No puedes pensar que tu carrera acabará en el momento en que salgas de esa empresa.
Eso sí, te recomendamos que antes de presentar tu renuncia, comiences a mandar tu currículum a otras compañías. Además, es importante que tengas un colchón económico para enfrentar tus gastos durante el tiempo que estés sin empleo.
Cuándo esperar a que te despidan
En general, podríamos decirte que esperar a que te den las gracias son es lo mejor para tu futuro laboral. Sean cuales sean los motivos por los que sales de la empresa, un despido es una marca que no podrás borrar de tu historial profesional.
No pretendemos ser dramáticos, pero al momento de solicitar empleo en otra compañía, querrán pedir referencias en tus trabajos anteriores. Si no saliste en buenos términos de ahí, seguramente quien fue tu jefe inmediato no tendrá muy buenos comentarios sobre tu desempeño, ¿no crees?
Al final del día, tú eres el único que puede definir qué es lo mejor para tu futuro profesional.