Todas aquellas veces en que en nuestro aprendizaje sexual degustamos de maravillosas caricias, estimulantes besos, grandes cachondeos, y cuando lo máximo a lo que se aspira es tocar senos, roces en el pene, sin llegar al coito, se le llama: Petting.
Por lo general, el Petting, es una práctica más común entre adolescentes, porque existen caricias sexuales pero sin penetración.
¿No amas aquellos tiempos en donde la sexualidad era totalmente exploratoria? Se iniciaba con besos (aumentando la intensidad), caricias leves por encima de la ropa hasta el sexo oral; entre otras cosas que hacías, todo ayudaba a comenzar tu vida sexual, a conocerte mejor a ti mismo y a conocer el cuerpo, el deseo, y el mapa erótico de tu pareja.
Bien, esta práctica es una opción genial para aquellos que desean variar el acto sexual y no saben cómo, o que desean explorar nuevas oportunidades de desarrollo del placer. También podríamos agregar que es una forma interesante y divertida de generar buen manejo de situaciones sexuales ¿o apoco no crees que es interesante decir una noche: -vamos a jugar a que hacíamos de todo menos penetrar-?
Una de las grandes ventajas del Petting es que es una forma de entretenimiento distinta con la que desarrollas tu capacidad para dar y recibir placer, y hasta puede llegar a ser una excelente herramienta para liberarte del paradigma de que el sexo es sólo genitalidad; que cierto, sí, nuestros genitales son parte importante del erotismo, pero no son lo sustancial, son el engranaje de un todo en el sexo.
Es muy interesante pensar cómo es que el Petting, en los jóvenes, se practica más por el placer y la naturalidad de simplemente hacerlo y que en la adultez se haga más por practicar una “nueva” naturaleza que simplifique el desarrollo en pareja. Irónico ¿no? No te presento nada nuevo, sólo te invito a que explores de nuevo tus raíces sexuales, donde no sabías hasta dónde llegarías.
Para que tu momento sexual se convierta de bajo a alto voltaje, agrégale Petting; la adrenalina que genera el “todo esta permitido» menos la penetración, hace que perfecciones tu arte amatorio, así como mayor conexión con tu pareja.
¡Desenfrénate con instintos de adolescente y desata pasiones!