Llevo 20 años de mi vida estudiando el proceso de sanación, he conocido personalmente a decenas de supuestos sanadores que dicen tener el poder de curar a otros y he podido estudiarlos de cerca, desgraciadamente, hasta el día de hoy no conozco a nadie que lo logre.
Efecto Placebo.
¿Podrías pensar en la existencia de una medicina que fuera capaz de curar una enorme variedad de diferentes enfermedades, así como desaparecer dolores agudos? Pues ese medicamento existe y se llama “Placebo”.
El Placebo es una sustancia sin propiedades terapéuticas; a pesar de ello induce cambios poderosos en los pacientes, provocando que estos sanen. La sustancia puede ser cualquier cosa, desde agua hasta pastillas de azúcar. En ello lo importante es que el enfermo CREA que esta sustancia lo curará, y con esto pone en acción todo el proceso curativo. Nuestras creencias juegan un papel determinante en nuestra salud. Un enfermo que cree firmemente en la posibilidad de sanar tiene muchas más posibilidades de que esto ocurra, a las que tiene un enfermo que cree que no hay posibilidades de sanación.
En la Universidad de Texas se hizo el siguiente experimento con pacientes que presentaban inflamación en las rodillas y dolor. Los médicos anestesiaban a los pacientes y fingían una operación. Dos años después las personas que se habían sometido a esa cirugía falsa sentían el mismo alivio que las personas que realmente habían sido operadas.
En cuanto al tratamiento del dolor, el Placebo ha presentado la misma eficacia que los medicamentos entre el 50 y el 60 por ciento de los casos. Un estudio realizado en el Instituto de Mente-Cuerpo de la Universidad de Harvard, reveló que el Placebo ofrece beneficios clínicos entre un 60 y 90 por ciento de los casos.
Los practicantes de la curación a través de la fe, sólo pueden citar evidencias anecdóticas de casos donde ha tenido éxito, ignorando los muchísimos más casos donde los pacientes siguen enfermos o mueren a pesar de los esfuerzos de las prácticas empleadas. Podemos atribuir cualquier éxito al efecto Placebo o a la remisión espontánea, algunas personas sanan con o sin tratamiento, y suele ser natural dar crédito al último tratamiento recibido para la enfermedad (lo que es una falacia lógica llamada post hoc ergo propter hoc).
El famoso tele predicador y sanador a través de la fe de los años 1980 Peter Popoff, fue públicamente desenmascarado por el célebre escéptico James Randi trabajando conjuntamente con el popular presentador de televisión Johnny Carson, cuando se descubrió que las aparentes curaciones milagrosas y profecías realizadas por Popoff eran en realidad un elaborado montaje pre-elaborado, incluyendo la actuación de colaboradores que se hacían pasar por público legítimo y el uso de receptores de radio intrauriculares. Otros sanadores a través de la fe como Benny Hinn (quien fue grabado con cámaras ocultas y retratado en un episodio de The Fifth Estate) también han sido objeto de acusaciones de actividades fraudulentas.
Finalmente, una pregunta insidiosa nunca ha sido respondida satisfactoriamente: ¿Por qué la oración puede curar, remitir o postergar un cáncer, una leucemia o un síndrome crónico que necesita tiempo para desarrollarse, pero nunca ha devuelto la vista a un invidente o regenerado un corazón con alguna cardiopatía? El poder de la fe parece ser selectivo en el tipo de patologías en las que puede ser efectiva, lo que supone una contradicción nativa ya que en su más básico enunciado el poder de la fe no tiene límites preestablecidos.
Personas con supuestos súper-poderes capaces de curar a las personas.
No creo que esté mal el que se use la sugestión para curar, al contrario esta bien. Cualquier cosa que ayude a que un ser humano se sane debe ser bienvenida, lo que no está bien es manipular a la gente para mitificar la imagen de alguien.
El Doctor Deepack Chopra un famoso Endocrinólogo y experto en el tema de Sanción Mente Cuerpo, continuamente menciona un dicho antiquísimo en el mundo de la medicina: “La naturaleza cura, el medico pasa la factura”. La mayoría de las enfermedades son auto limitantes, lo cual significa que aunque el enfermo no tome medicamento o terapia alguna, la enfermedad va a desaparecer. El cuerpo humano tiene un mecanismo de auto-sanación impresionante, en ciertas circunstancias estos mecanismos se detienen y lo que hace cualquier sanador es ayudar a que estas interferencias se eliminen, pero es el individuo el que se sana a sí mismo.
Mucha gente en el mundo lucra con los miedos, la ignorancia y la baja autoestima de las personas, personas que creen que sólo otros pueden ser poderosos, otros, menos ellos. Todos los grandes maestros espirituales han enseñado a la gente. “El PODER VIVE EN TI”. Jamás les dijeron a las personas: “sólo yo tengo el poder, acércate a mí”. Jamás podrás encontrar en la Biblia una cita en la que Jesús le allá dicho a alguien “Yo te curé”. Y termino con una cita de este libro:
Entrando a la casa se les acercaron los ciegos y Jesús les dijo:
¿Creéis que puedo hacer yo esto?
Respondiéndole: Sí Señor
Hágase en vosotros según vuestra fe.
Y se abrieron sus ojos.