A menos que vivas debajo de una piedra, habrás oído del Síndrome de Turner. Probablemente no sepas qué es, pero este nombre aparece a cada rato en los medios de comunicación. Esto porque la Secretaría de Salud ha emprendido una campaña para promover la detección temprana de este padecimiento.
Dado que nosotros no teníamos ni idea de en qué consiste esta enfermedad, nos lanzamos a platicar con el doctor José Miguel Flores Nieto, adscrito a la subdirección de Educación y Cultura de Envejecimiento, de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México.
El médico y funcionario local nos explicó que el Síndrome de Turner es un trastorno genético que afecta exclusivamente a las mujeres. Esta alteración se da en el último par de cromosomas, el que determina el género.
Recuerda que los seres humanos tenemos 46 cromosomas, organizados en pares. En el último, el 23, la estructura del hombre es XY y la de las mujeres XX.
En el Síndrome de Turner, el cromosoma X tiene una alteración en la estructura de su ADN, por lo que las niñas presentan problemas en el desarrollo de sus características sexuales, provocando que sean infértiles.
Para ser específicos, quienes tienen este padecimiento no desarrollan adecuadamente sus glándulas mamarias y su aparato reproductivo, por lo que fácilmente llegan a los 15 años sin que se presente la menstruación.
Como siempre, la detección temprana es vital para brindar el tratamiento adecuado. Es cierto que no existe cura para el Síndrome de Turner, pero puede proveerse la terapia médica para igualar el desarrollo de cualquier mujer.
Señales
Debes saber que las niñas que nacen con Síndrome de Turner tienen rasgos físicos muy definidos:
- Tobillos y manos que parecen hinchados. Esto se debe a una alteración de su estructura ósea.
- Cuello corto. No se forma el espacio entre las vértebras cervicales.
- La implantación (límite del crecimiento del cabello en la nuca) está más debajo de lo normal. Esto se debe a la falta de espacio entre las cervicales.
- Talla pequeña
Si detectas alguna de estas señales en tu hija, es importante que la lleves con un endocrinólogo. Él realizará las pruebas necesarias para confirmar o descartar la presencia del Síndrome de Turner, así como dar el tratamiento necesario.
Usualmente, para tratar este padecimiento se aplica una terapia hormonal, la cual incluye progesterona, estrógenos y hormona del crecimiento, las cuales favorecerán el desarrollo de las características sexuales, y del cuerpo en general.
La terapia hormonal debe suministrarse de por vida, de ahí que las autoridades estén considerando agregar al Síndrome de Turner a la lista de enfermedades que cubre el Seguro Popular. De lograrse, las pacientes podrán recibir su tratamiento sin costo.
En tanto, es importante que prestes atención al desarrollo físico de tu pequeña. Si ya no es una bebé, pero notas que su estatura es menor a la de otras niñas de su edad, debes acercarte a un especialista.
Te presente que el Síndrome de Turner está asociado a otras enfermedades crónicas, como la obesidad, la hipertensión y los padecimientos renales. ¡Una visita oportuna al consultorio médico puede hacer la diferencia!