Si llegaste hasta aquí y estás leyendo esto, es porque debes estar contemplando un tratamiento de carillas para mejorar tu salud y estética dental, es por eso que quiero preguntarte, ¿qué tan importante es para ti realizar una compra inteligente?
Piensa en esto: estás en una tienda de ropa y tienes frente a ti dos playeras que a simple vista se ven exactamente igual. La primera está realizada con fibras de la más alta calidad, no se decolora con el tiempo, no pierde su forma original y lo mejor de todo ¡te va a durar 20 años!; la segunda está realizada con materiales de baja calidad, es probable que se decolore después de un par de lavadas o peor aún que pierda su forma original y ya no sea útil a los 6 meses.
¿Cuál de las dos comprarías?
Indudablemente la primera, la de mejor calidad. Sé que debes estar pensando: “¿pero cuánto cuesta cada playera?”, y sí, efectivamente la primera vale más que la segunda, únicamente que deberás comprar 40 playeras de baja calidad, para que duren lo mismo que la de alta calidad.
Exactamente lo mismo pasa con las carillas dentales, piezas que en palabras sencillas recubren la parte exterior de los dientes originales, haciendo que se vean más atractivos, blancos y simétricos. Muchos pacientes han llegando conmigo pidiendo mi opinión sobre las carillas de resina Vs las de porcelana, y yo les respondo con esta pregunta: ¿Cuántos años más piensas vivir?
Y es que definitivamente, si quieres vivir 5 años más, lo mejor que puedes hacer es pagar poco dinero por unas carillas de resina, pero si quieres vivir muchísimos años más, con salud bucal y olvidarte para siempre de la apariencia de tus dientes, debes invertir en carillas de porcelana. Te voy a explicar por qué.
Es muy sencillo, la resina NO es un material hecho para vivir en la boca, por lo que su uso puede traerte consecuencias graves que van desde el mal aliento, enfermedad periodontal y caries; entonces al paso de los años habrás desembolsado más dinero para reparar estas consecuencias, que si desde un principio hubieras invertido en carillas de porcelana.
Además, la resina es un material que cuesta poco pero que de la misma forma, dura poco, es decir, una carilla de resina puede tener una vida de hasta 7 años (si tus hábitos son excelentes); y por si todo esto fuera poco, tendrás que acudir al dentista para pulirlas una vez al año y como es de esperarse, cumplida su vida útil tienen que ser remplazadas. Es por eso que una infinidad de dentistas las regalan y ofertan, porque a ellos no les representan costo, inversión o pérdida alguna.
Sin embargo, el buen trabajo y los buenos materiales NO SE REGALAN, y me refiero específicamente a las carillas de porcelana colocadas por los mejores dentistas. Muchas veces mis colegas prefieren “verle la cara a los pacientes” vendiéndoles gato por liebre pensando únicamente en el interés personal, y es que la lógica es muy sencilla: “prefiero venderte 5 veces carillas baratas, que una vez carillas caras”, porque al más puro estilo de los “abonos chiquitos”, a largo plazo el paciente habrá dejado más dinero pagando constantemente carillas baratas, que un sólo pago de carillas más caras pero de excelente calidad.
Las ventajas de las carillas de porcelana son muchas, por ejemplo: resisten muy bien a las abrasiones, es casi imposible que cambien de color debido a los malos hábitos de consumo, es decir, nunca se pondrán amarillos, la porcelana permite un blanco casi perfecto, no se despegan, no se parten y no tienen consecuencias negativas en la salud del paciente.
Ahora todas las cartas están de tu lado, pregúntate si prefieres gastar o invertir y no te dejes engañar por los dentistas que te prometan cosas imposibles, por aquellos que te platiquen mil y un mentiras para convencerte, por esos que con un par de carillas de resina gratis, creen que pueden comprarte. Recuerda que ningún paciente debe ser subestimado, pero principalmente, recuerda que con la salud NO SE JUEGA.
¡Nos leemos próximamente! y recuerda ponerte en contacto conmigo para cualquier duda relacionada con la salud dental.