Hace algunos años cuando mi hijo mayor estaba en maternal asistí a la escuela de padres, éramos tal vez 30 papás y la persona que daba la ponencia nos hizo la siguiente pregunta ¿Cuál es el sentimiento que más predomina en su vida?
Uno a uno fueron contestando, la respuesta de todos era similar: el miedo y la preocupación; miedo a que a sus hijos le pasara algo, que les faltara el trabajo, que no pudieran darle a su familia lo que necesitan.
Cada vez que uno repetía ese sentimiento los demás asistían identificándose con él, yo sentía que le daban la bienvenida a un club, llego mi turno y dije: la felicidad, todos voltearon a verme sorprendidos y de inmediato comenzaron a cuestionarme como si mi respuesta fuera errónea y tuviera que recapacitar.
Hace 12 años no había estudiado tan a fondo el desarrollo humano, ni la inteligencia emocional ni nada relacionado a estos temas que me hiciera dar esa respuesta premeditada, la verdad es que era un papá con 26 años de edad, ilusionado de ver crecer mi familia, de trabajar y estar prosperando en mi trabajo y cada día lo disfrutaba por que valía la pena vivirlo simplemente.
Creo que parte de mi secreto para ser feliz es que siempre he disfrutado lo que tengo, pero también siempre he tenido un nuevo reto y un nuevo plan.
Cuando era niño mi familia no tenía mucho, y era feliz con lo que tenía, recuerdo que mi amigo Ponchito tenía toda la colección de He Man y un primo tenía una amplia colección de Star Wars, yo tenía solo 3 Hemanes (como les decíamos) y sólo 4 personajes de Star Wars pero los disfrutaba mucho, y también disfrutaba igual cuando iba a casa de Ponchito y podía jugar con toda su colección o cuando visitaba a mi primo.
El cuestionamiento de los papás era ¿no te da miedo quedarte sin trabajo? ¿No te da miedo que algo le pase a tus hijos? Yo simplemente respondí no, sin embargo pensé para mí, dentro de lo que está en mis manos tomo precauciones, pero hay muchas cosas que no dependen de mí y que pueden pasar ¿para qué preocuparme por algo que en el presente no está pasando?
Ahora tengo 38 años y a pesar de varios comienzos después de haber perdido mi trabajo, mi casa y mi auto sigo con el mismo sentimiento de felicidad y la ilusión de tener nuevos planes y ejecutarlos, sé que si lo logré una vez, lo puedo volver hacer.
El miedo es un sentimiento que nuestro cuerpo desarrolló para estar alerta, para defendernos o huir de un peligro inminente. Hoy en día sentimos más miedo de cosas irreales, de cosas que nuestra imaginación crea, que de situaciones verdaderamente peligrosas.
Nuestro cuerpo se desgasta, se cansa y agota todos los días con lo que imaginamos que pueda pasar igual que como si en verdad nos hubiera perseguido un león, así de grave es sentir miedo.
Te invito a vivir y sentir lo que es real, lo que está en el presente, hay cosas que por más que te preocupes no podrás evitar, pero hay muchas cosas de las que te estás perdiendo por sobrevivir y no vivir.
Te invito a vivir tu vida, a vivir sin miedo te sorprenderá todo lo podrás lograr.