El ser humano por naturaleza es un ser social,de pertenecer. Tiene la necesidad de convivir, relacionarse con sus iguales, mantenerse inmerso en la sociedad, compartir inquietudes, gustos, vivir momentos donde compagina y disfruta con sus grupos más cercanos: amigos y familia.
Venimos programados para sentirnos bien al ser aceptados y mal al ser excluidos. Esto no significa que para encajar en un grupo, debas fingir, apagar tu luz, ni aparentar ser alguien que no eres ¡al contrario! la esencia de cada individuo es única, irrepetible e inigualable.
Necesitamos percibir que formamos parte de un grupo o que estamos conectados con los demás para que todo fluya sin que nada influya. Un grupo de amigos, la universidad ,la familia, y por supuesto a un país. Después de esta premisa cada individuo desempeña un rol en la sociedad; como hijo, novio, hermano, amigo,etc.
Se puede encontrar dentro de cada rol social tres clases de comportamientos.
- Un comportamiento exigido.
- Un comportamiento permitido.
- Un comportamiento prohibido.
Según Maslow, desde hace muchos años el hombre tenía la necesidad de pertenecer un grupo o en este caso un clan para sobrevivir. Se ponían de acuerdo para ir de caza o cuidar la aldea. Cada uno desempeñaba diferentes papeles que al unirnos se convertía en una sociedad y cada eslabón de esa cadena era importante.
Fabio Valdés nos habla en está ocasión de la pertenencia ¡Checa el vídeo!