Pasa que en tu rutina diaria, hay poco tiempo para cuidar de tu cabello y a veces el alaciado puede repercutir terriblemente en la salud del mismo. Aquí te algunos remedios caseros sobre cómo alaciar el cabello sin dañarlo.
Las continuas planchadas de cabello lo estropean, al grado de dejarlo más que con una apariencia sexy, con una de estropajo quemado. Para evitar ese tipo de problemas y ¡hasta que se te caiga tu hermoso cabello!, te compartimos estos tips para que te alacies el cabello sin dejarle la más mínima patinada de mosca como rastro.
Cómo alaciar el cabello sin dañarlo
Remedios naturales
Si fuiste a que te hicieran un alaciado permanente en el salón de belleza, te contamos que el efecto dura aproximadamente dos meses en los que ¡uf! te librarás de la lata de alisártelo cada mañana, pero con las rudas consecuencias también de que las hebras de tu cabello se dañarán y que después será un poco más de lío peinarlas.
«PROCURA COQUETEARME MÁS Y NO REPARO DE LO QUE TE HARÉ»
Esa rolita te la dedicará en baile y apariencia maravillosa tu atormentado cabello al probar al menos alguno de los siguientes remedios y recetas naturales que buscamos hoy para tí, haciendo especial énfasis en que los apliques durante un fin de semana o cualquier día que tengas más tiempo disponible para consentirte.
Plátano y leche
No es albur y sí un remedio que proveerá a tu cabello de una gran variedad de nutrientes, entre ellos, de Vitamina B6, que asegurará que tus folículos pilosos reciban suficiente oxígeno para mantenerse saludables. Subtítulos: evitará que se te caiga tu lindo cabello. 😉
Modo de preparación: Hacer el plátano puré e ir añadiendo la leche hasta que obtengas una forma pastosa en su consistencia; aplicarlo sobre tu cabello húmedo y dejarlo actuar hora y media hasta que se seque, para después enjuagarlo y peinarlo bien.
Limón y miel
¿Sabías que la miel aporta humectación y además protege tu cabello? Mientras, el limón ayuda a la piel y al cabello, gracias a sus ácidos alfahidroxiácidos, exfoliando las células muertas de la piel y otorgando propiedades nutritivas, además del crecimiento de un cabello más sano y hermoso.
Modo de preparación: Combinar una cucharada de miel con media cucharada de jugo de un limón –suma cantidad conforme al largo de tu cabello–. Aplícalos sobre todo tu cabello, envuélvelo en una toalla tibia y dejálos por un lapso de 45 minutos.
¿Resultados en ambos remedios? ¡Excelentes mascarillas para alisar y proteger tu cabello!
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