Alguna vez te has preguntado ¿cómo surgen las emociones de tus hijos? ¿qué es lo que tu hijo experimenta cuando lo regañas o lo abrazas? Ahora mismo te vas a enterar de los procesos emocionales que tu hijo experimenta constantemente.
Vámonos por partes…
¿Qué son las emociones?
Tomando como eje el libro de Teresa Garcia Hubad: “No hay niño malo”, las emociones son procesos fundamentales y complejos del funcionamiento cerebral.
Estos ayudan a protegerte del peligro y también a establecer un lazo emocional con familiares o amigos.
Generalmente las emociones son controladas, limitadas, canceladas, para acabar pronto no se toman muy en cuenta al momento de tomar una decisión. El ser humano es muy racional, aunque existen casos muy contados que se guían por el corazoncito.
En el pasado, lo mejor era controlar las emociones y no dejarnos guiar por ellas, en la actualidad la educación que los padres les están dando a sus hijos es un poco más humana. El hecho de permitirles contactar con esa sensación que los puede estar irritando o bien haciéndolos muy felices viene de la mano con su estado de ánimo, sus acciones, y sobre todo su comportamiento.
Sin emociones no seríamos una especie que forzosamente tiene que vivir en sociedad. La interacción es una función vital que el ser humano tiene que desarrollar para no vivir de depresión, conocer más personas, compartir momentos y demostrar afecto.
¿Cómo surgen las emociones?
1.- Respuesta inicial de orientación
En esta etapa el cuerpo percibe un estímulo interno o externo, activando los sistemas de alerta. Un ejemplo perfecto puede ser escuchar una alarma sísmica, el cuerpo automáticamente reacciona ante ese sonido y corre, lo relaciona con una situación de peligro.
2.- Proceso de evaluación-elaboración y excitación
Aquí el cuerpo toma el estímulo como bueno o malo. Puede estar tu hijo jugando y de repente un niño le pega, su estado de alerta se pone activo, el corazón aumenta su ritmo cardiaco , los músculos se tensan y se instinto de protección esta en modo on.
3.- Emociones categóricas
Las emociones crean el sentido de la vida, en esta etapa las sensaciones son más elaboradas, pasan de ser iniciales a ser categóricas ¿o sea cómo? de ser una sensación de bueno, malo, aléjate, acércate pasan a ser emociones como enojo, felicidad, peligro, etc.
Un ejemplo tangible del gran peso que tienen las emociones tanto en tu vida como en la de tus hijos está en la película “Intensamente”, en dónde el crecimiento, madurez, y felicidad se basan en las emociones.
Así que si aún no la has visto ¿qué esperas? Te dejará una gran lección de vida…
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