Últimamente muchos de mis pacientes llegan a consulta con temas que parecen ser muy diversos y al final se resumen a lo mismo; un error en la comunicación. Es muy común pensar que porque hablamos el mismo idioma la comunicación será fácil.
La primera parte que dificulta es que sólo el 10% o 15% de lo que comunicas es transmitido por las palabras que escoges, el 85% o 90% de la comunicación es lenguaje corporal y tono de voz. Es decir, si yo estoy enojado por algo que me pasó en el trabajo y en ese momento le comunico a mi novia cuanto la amo, es probable que parte del mensaje se pierda en la forma que usaré debido al enojo.
La otra parte importante es la escucha; todos escuchamos a través de nuestros filtros y heridas, y esto afecta tanto a las palabras como el tono. Si yo vengo de una familia dónde lo más común era gritarse es muy probable que mi tolerancia a los gritos sea más alta que la del promedio de las personas igual que mi tono de voz. Si mi mamá o papá antes de regañarme me decían príncipe o princesita es muy probable que cuando alguien comience usando esa frase yo inconscientemente tenga cierto nivel de resistencia.
En el tema de la comunicación, una vez más es clave la responsabilidad. Lo primero que se debe de hacer es hacerme cargo de mis sensaciones y mi heridas. Entender que son mías aun cuando la agresión es directa, las heridas son mías. Si alguien me dice retrasado mental y yo nunca me he sentido tonto es muy probable que aún esa violencia directa no me afecte.
Entonces cuando te sientas violentado por alguna frase, sea o no violenta de manera directa, pregúntate ¿Qué herida están tocando que me estoy sintiendo agredida? Asume que es tu responsabilidad esa herida. Si estás hablando con alguien de tu confianza, comunica lo que escuchaste/sentiste.
Cuando estés transmitiendo un mensaje recuerda que todos escuchamos a través de filtros. Sí cuando estás hablando con alguien su reacción no es acorde a lo que tu estas diciendo asume que no transmitiste el mensaje de manera clara y busca una nueva manera de decirlo.
Este ejercicio a veces puede llevar más tiempo del que quisiéramos pero si ambas partes toman su responsabilidad poco a poco irán teniendo una comunicación más efectiva y clara. Y con eso habrá acuerdos más fáciles y menos pleitos.
Esta semana quiero dejarles de tarea que lean la columna con alguien de su confianza y comiencen a hacer el ejercicio de comunicación de manera clara cada uno tomando su responsabilidad.