Se trata de un padecimiento que por frecuencia (uno de cada 1,000 nacidos vivos), todos hemos tenido contacto en algún momento de nuestras vidas, e incluso es altamente probable que exista dentro de nuestras familias extendidas.
En este esfuerzo que se ha hecho en los últimos años con las conmemoraciones de los días mundiales de múltiples enfermedades, es que desde el 21 de marzo del 2021 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tomó la decisión de que se dedicara al Síndrome de Down. Sobre todo, por el tema simbólico, el 21 de marzo es justo porque la trisomía 21 (el contar con 3 cromosomas 21) es la razón genética que subyace a la presentación clínica del síndrome.
En eta ocasión no se cuenta con el lema en particular para especializar la atención del público en general, pero el objetivo general de un día especial para el síndrome de Down es la recomendación general de manejo de los últimos años. En lugar de fijarse en los deterioros que presenta los pacientes afectados, hay que hacer un juicio muy cuidadoso de las virtudes que presenta para fortalecerlas y estimularlas y que, de esta forma, sirvan de punto de arranque para un mejor desarrollo personal, intelectual y social.