Bien, podríamos comenzar por definirlas, ya que, si no lo hacemos nos vamos a quedar con la idea de que sólo existe el “delirio de amor”. Las ideas delirantes son aquellas creencias falsas que surgen de una mal interpretación de la realidad y que son firmemente sostenidas por la persona a pesar de recibir evidencia de que su idea está equivocada.
Tipos de ideas delirantes:
- Delirios paranoides: Se trata de ideas de daño y de perjuicio en contra del sujeto afectado o de sus seres queridos.
- Delirios de grandiosidad: aquellas donde la persona se encuentra sobrevalorada en sus diferentes capacidades.
- Delirio metacognitivo: se llama así a las que se cree firmemente que se le puede leer y conocer el pensamiento del que las sufre.
- Delirio celotípico: existe la creencia de que la pareja le está siendo infiel.
- Delirio erotomaníaco: es una variante del anterior, pero aquí se trata de que el paciente está convencido de que alguien, usualmente famoso, se encuentra perdidamente enamorado de la persona en cuestión.
- Delirios de falsa identificación: en ellas se piensa que mis familiares y amigos son sustituidos por otras personas.
Enfermedades mentales que cuentan con ideas delirantes
Ahora nos toca mencionar en que enfermedades podemos reconocer estas ideas delirantes como parte de los síntomas que las componen:
- Esquizofrenia: se trata de la Reyna de las enfermedades con delirios. Primordialmente hablamos de delirios de tipo paranoides con mala estructuración del plan de generarme daño.
- Trastorno bipolar: en la fase de manía encontramos las ideas de grandiosidad y en la fase depresiva con ideas de ruina y catastróficas desproporcionadas.
- Trastorno delirante: es una enfermedad donde, a diferencia de la esquizofrenia, las ideas delirantes son bien estructuradas, con una explicación casi lógica de cómo se presentan y con la gran variedad de tipos que ya describimos. Usualmente no se afecta el resto de las esferas cognitivas del individuo como en la ya mencionada esquizofrenia.
- Retraso mental: los sujetos con una discapacidad intelectual suelen tener ideas de tipo erotomaníaco o paranoide.
- Demencias: habiéndose afectado las capacidades de reconocimiento del medio ambiente en estos individuos, es muy frecuente que lleguen a desarrollar ideas de tipo paranoide.
- Otros trastornos neuropsiquiátricos: existen algunas lesiones específicas de la corteza cerebral que pueden incluir ideas delirantes. Probablemente el más conocido es el Síndrome de Capgras donde se piensa que alguno de mis familiares fue reemplazado por otra persona.
Como pueden ver, las ideas delirantes, son un gran reflejo de cómo la mente alterada nos puede jugar chueco con nuestra percepción de la realidad.