Es cada vez más frecuente que los médicos tengamos enfrente del escritorio a un paciente con mayor acceso a información de todo tipo. Es sólo cuestión de escribir en google acerca de una enfermedad para ver multitud de páginas sobre el tema, instituciones que se dedican a ese padecimiento, blogs de experiencia de pacientes; y cuando llegamos a la sección de tratamientos, fichas técnicas de cómo funciona y que puede producir de efectos adversos un medicamento. A esta ficha técnica se le conoce como Información Para Prescribir o IPP.
El primer punto a comentar al respecto es que los medicamentos, TODOS, TODOS, TODOS, tienen efectos adversos, hasta el paracetamol que lo recetan las abuelitas a cualquier embarazada. Estos efectos adversos se cuenta con la obligación por parte de las autoridades regulatorias de estudiarlos a fondo para poder tener toda la información necesario al monitorear un manejo farmacológico de una enfermedad.
Específicamente en el campo de la neuropsiquiatría las IPP de los medicamentos de esta área son capaces de confundir al paciente más experto. Les enumero los puntos de interés al respecto:
- Si leo de un antidepresivo dice que puede producir intentos de suicidio, si leo de un anticonvulsivo dice que puede producir convulsiones, si leo de un ansiolítico dice que puede producir crisis de ansiedad, etc. Al que explicar que cuando se prueba un medicamento para una enfermedad en particular, primero se tiene que analizar en animales, luego en voluntarios sanos y finalmente en personas que padecen de la enfermedad en cuestión. En ese momento se prueba este medicamento contra una sustancia inactiva que se conoce como placebo. Entonces si estoy probando un antidepresivo voy a buscar pacientes que sufran de depresión y les voy a ofrecer a un grupo el medicamento nuevo y a otro el placebo. Siendo así no es de extrañarse que a un grupo de pacientes los veamos sufriendo de las complicaciones de la depresión, como pueden ser los intentos de suicidio. Generalmente estaríamos hablando de los pacientes que obtuvieron manejo con placebo. Por requerimientos de las autoridades regulatorias, los laboratorios farmacéuticos tienen la obligación de reportar todos los eventos adversos que se produzcan en más del 1% de la población en estudio. Esta es la razón por la cual hay medicamentos que dice en su IPP que pueden producir las complicaciones de la enfermedad que intentan curar.
- Durante el estudio de investigación también se tiene la responsabilidad de reportar todo aquel evento adverso aunque no esté relacionado con la enfermedad o el medicamento en estudio que se haya presentado con suficiente frecuencia en los pacientes.
El mejor ejemplo para explicar este punto sería el siguiente: en un estudio donde reunimos a 3000 pacientes con la misma enfermedad en un tratamiento nuevo, imaginen la cantidad de personas que decidieron en alguna noche de antojo ir a cenar unos buenos tacos al pastor de la esquina y que les dio una diarrea considerable al día siguiente. El paciente tiene la responsabilidad de reportarle al médico investigador de este síntoma. Si la cantidad de pacientes que tuvieron diarrea fue importante, la IPP tiene que mencionar que el medicamento puede producir diarrea aunque esto haya sido producto de un evento muy frecuente en la población que está en el estudio y en la que no lo está. - Finalmente, lo deseable es tener a un paciente lo más informado posible, pero ante cualquier duda, por arriba del internet y el Dr. Google, hay que preguntarle a tu médico que él es el mejor para interpretar tus síntomas desde el punto de visto específico de tu padecimiento.