Últimamente he vuelto a contactar con esta realidad simple, sencilla y autentica: ¡La vida nos ama! Quizá pienses que es soberbio o mamón, y si estás leyendo o escuchando estas palabras y piensas eso, es porque no te has dado cuenta que la vida también te ama.
Últimamente he estado robándole las palabras a mis poetas y cantantes favoritos para poderle dar forma a todas mis sensaciones e historias, tristemente esas palabras no bastan para describir las mías y más tristemente yo no tengo la capacidad de expresarme como ellos.
Me gustaría poder sacar de mi pecho un “mientras dure” como Edel Juárez, un “gracias a la vida” como Julio Numhauser o un “te debo este sueño” como Rosana. Pero las palabras en mi cabeza no son tan bellas ni tan ordenadas.
Y a veces un “estados de ánimo” de Mario Benedetti o un “gracias a la vida” de Violeta Parra bastan para poder expresar todo lo que siento. Pero como puedo usar las palabras de mis historias no vividas el “imagínate” de Silvio Rodríguez que nunca tuve el valor de vivir o como puedo adquirir todo el cinismo de un Joaquín Sabina para vivir un “y sin embargo”
Y más allá de todo lo que no he vivido ¿Cómo puedo expresar todo lo que sí? Como le digo al mundo que estoy lleno y feliz de no tener clase social, como puedo mostrar todo el amor que existe en mi corazón, como puedo explicarle a todos los que amo que tiene un lugar hermoso y único en mi corazón.
Me gustaría ser un Whitman para poder expresar como amo la vida, para poder decir que cada gota de sudor, cada lágrima de dolor y cada cicatriz en mi corazón, solo son parte de una historia más grande y bella que eso.
Como puedo explicarle al mundo cuánto vale la pena arriesgarse. Carajo!!! Veo a tantas personas con sus corazones guardados y sus vidas quietas que no puedo con las ganas de gritarles VIVE que como dicen los poetas al final solo nos arrepentiremos de lo que no vivimos.
Quien soy yo para querer mandar estos mensajes al mundo? Quien me dio la soberbia de pensar que merezco ser escuchado? De merecerlo, dios me habría dado mejores palabras para decirlo. Pero si no soy nadie para contar esto? Porque dios me lleno de historias y de una vida que aunque a veces me patea, me ama mucho más que eso
Quien soy yo para jugar a entender a dios? No, no soy tanto. Solo soy un gordito en su cuarto queriendo contagiarte para que puedas ver que la vida te ama y solo está esperando a que abras tu corazón para que ese amor entre. Solo soy un terapeuta que aunque no te conoce te ama porque sabe que con todas tus historias, errores y defectos eres digno de ser amado. Soy un pequeño humano queriendo hacer una diferencia en tu vida, como muchos pequeños gigantes la hicieron en la mía.