Se viene el fin de año, no seas de esas personas que se quedarán a trabajar el mero 30 y 31 de diciembre. Es mejor adelantar chamaba, así quedarás bien con tu jefe y podrás irte a emborrachar con tus amigotes.
Desde luego hay trabajos de dependen mucho de las circunstancias que se van dando día con día en cada jornada laboral, por esa razón cuando se habla de adelantar chamba pareciera que estamos hablando de cosas casi imposibles.
¡Ah!, pero si pones atención podrás ver que hay cosas cotidianas que haces a diario y que no requieren de otra persona. Siempre habrá cositas que puedes ir adelantando, y si lo haces, tu vida a finales de año será más cómoda y tendrás más tiempo para disfrutar de las fiestas decembrinas.
Cuando adelantas chamba la vida no se te hace tan complicada, te mantienes relajado y las cosas se resuelven con más facilidad, eso te da tiempo para comprar los regalos navideños, organizar posadas y demás.
Aquí las ventajas de adelantar tu trabajo:
1.- Quedas bien con el jefe. «¿Que qué, que qué? Ya lo tengo listo jefecito», «oh, Godínez, ¿cómo lo hiciste tan rápido», «oh, pues ya sabe, me gusta terminar a tiempo».
2.- Saldrás temprano en diciembre. «Pues ahí nos vidrios camaradas, este muñeco ya se va a su casa».
3.- Menos estrés. «La cosa es estar alivianado y no ponerse todo ‘neuras’, sobre todo en época navideña».
4.- Tienes tiempo para hacer tus compras navideñas. «Ahora sí que si salimos temprano, pues vámonos al Centro Histérico a comprar el arbolito de navidad y los regalos pa’ los chamacos».
5.- Eres más eficiente. «¿Que si ya lo tengo? ¡Por su pollo!, este trabajo está terminado, revisado y perfeccionado».
6.- Tienes más tiempo y dinero para ti. «Si salgo temprano y le caigo temprano a casa, tengo tiempo de prepararme un lunch y no andar gastando cuando vaya a ‘chambear’».
7.- Eres digno de confianza. «Ah, pues Godínez tiene las cosas a tiempo, siempre está un paso adelante, creo que le asignaré a él el nuevo puesto».
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