Probablemente has escuchado o leído a varios de mis colegas sexólogos, pero ¿sabes realmente qué hacemos? ¿Cuál es nuestro trabajo? Hoy te sacaré de la duda, porque no, mi trabajo no es sólo salir en programas hablando de sexo… mi trabajo del día a día es platicar con gente, escucharlos y darles opciones, según el tema con el que lleguen.
Pero bueno, la pregunta de los 50,000 ¿Para qué alguien iría a consulta conmigo o con algún(a) otro(a) sexólogo (a)? Te dejo aquí algunas de las situaciones más comunes por las que alguien llega a consulta:
- Estoy embarazada y no sé qué hacer. No sé si abortar o no, qué opciones tengo, se lo digo o no a mi familia, etc.
- Tengo muchas dudas acerca del sexo.
- Quiero probar cosas nuevas y no sé cómo. Me da miedo experimentar.
- Preferencia genérica. ¿Quién me gusta? Soy gay o bisexual y no sé cómo manejarlo.
- Tengo problemas con mi pareja. Ya no se me antoja como antes, no somos compatibles en la cama, mi pareja quiere probar cosas nuevas y a mí me da miedo, etc.
- Tengo dudas acerca de cómo funciona mi sexualidad. Nunca me he tocado (masturbado), me da pena/miedo/vergüenza hablar de sexo, no conozco mi cuerpo ni sé cómo funciona, etc.
- Soy virgen y quiero saber cuándo es el momento indicado para tener relaciones sexuales. Tengo miedo de estar con alguien, ¿cómo sé cuándo es el o la indicada?
- Tengo un hijo de 5 años y no sé cómo hablarle de sexualidad. Me pregunta y no sé qué contestar. He cachado a mi hijo masturbándose y sólo tiene 4 años, ¿qué hago?
- Mi hija de 4 me está preguntando cómo nacen los bebés y yo no sé qué decirle.
- Tengo un hijo(a) adolescente y me da miedo que salga embarazada y/o que embarace a la novia. ¿Qué hago? ¿Cómo hablo de sexualidad con él o con ella?
- Siento que tengo una disfunción sexual, impotencia, eyaculación precoz, eyaculación retardada, disfunción eréctil, etc.
- Siento que soy un(a) depravado(a) sexual, me encanta tener relaciones sexuales, siento que no puedo parar ¿seré adicto(a) al sexo?
- Me gustan cosas muy “extrañas” al momento del sexo ¿estoy bien? ¿estoy enfermo(a)?
- Mi pareja dice que soy un(a) enfermo(a) sexual ¿cómo sé si esto es cierto?
- Creo que nunca he tenido un orgasmo. ¿Cómo sé si he tenido uno? Creo que no puedo, nunca he sentido algo remotamente parecido a lo que me cuentan que es un orgasmo. ¿Soy anorgásmica?
- Quiero mejorar mi vida sexual.
En fin, estas son sólo algunas de las situaciones por las que alguien acudiría con un(a) sexólogo(a). En realidad, cualquiera es buen candidato para ir a una sesión. Yo estoy convencida que todo deberíamos ir, aunque sea una vez en la vida con un(a) sexólogo(a) para –mínimo- saciar y solucionar TODAS las dudas que tenemos.
No necesitamos estar “mal” y/o “enfermos” para acudir a una consulta sexológica… como ven, trabajamos con niños, adolescentes, adultos, papás, casados, solteros, adultos en plenitud, etc… TODOS tenemos dudas y qué mejor que un especialista para sacarnos de la ignorancia sexual en la que muchos vivimos. Así que, atrévete a vivir una experiencia distinta… cuando sea que estés listo(a).