Después de empacarle como benditos estas festividades, ahora si viene lo bueno. El pavo, el bacalao, los romeritos, los ravioles dejan estragos en nuestro puerquecito. ¿Ahora que hago si ya me pase de buena?
No te preocupes lo de menos es eso. Lo comido, bailado, tomado y disfrutado nadie te lo quita. Conoce estos consejos que te damos para que paulatinamente vayan desapareciendo.
No desaparecerán por arte de magia, debes de trabajar en ello. ¡El que persevera alcanza!
- Cuida tu organismo
Acude con un nutriólogo, que estructure un plan alimenticio adecuado para tu organismo. De acuerdo con los requerimientos nutricionales que necesitas; cada cuerpo es diferente.
El plan tiene que incluir todos los grupos de alimentos distribuidos en forma equilibrada.
Todos los alimentos pueden formar parte de tu dieta, siempre y cuando respetes las porciones. Las frutas son excelentes fuentes de vitaminas y antioxidantes, las carnes y lácteos, de minerales y proteínas, los cereales y tubérculos son fuentes de vitaminas y fibra. Inclusive también las grasas y azúcares son necesarias para el buen funcionamiento del cuerpo.
- No hagas dietas rápidas
Cuando realizas una dieta que mágicamente te baja los 10 kilos,debes de tener mucho cuidado. Lo único que estas ocasionando es que tu cuerpo pierda toda el agua (deshidratación), y al no tener suficiente energía para trabajar comienza a utilizar el musculo. ¡Te van a salir más caro el caldo que las albóndigas!
- Dietas cetogénicas: Consisten en pocos carbs ,mucha proteína y grasas. Provocan serios trastornos renales y hepáticos.
- Dieta líquida: Limita la ingesta de vitaminas y minerales.
- Dieta del pepino o atún: Provocan alteraciones en el organismo al restringir el consumo de otros nutrientes.
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